**Sin tacto.
/ Por Sergio González Levet /
Seguramente los más de un millón y medio de ciudadanos que votaron por Cuitláhuac García en 2018 para que fuera el Gobernador de Veracruz están totalmente decepcionados porque les mintió como candidato con la promesa de que quitaría las casetas de pago de La Antigua y Plan del Río, con lo que el traslado por las autopistas de Veracruz Puerto a Xalapa sería totalmente gratuito.
Las casetas ahí siguen, gozan de cabal salud como en el Tenorio y no contentas con eso cada vez han ido incrementando más la cantidad que cobran, totalmente al contrario de lo que Cuitláhuac dijo que pasaría. Fue una primera mentira a la que siguieron y han seguido muchas más en el estilo de gobernar de los morenos.
Obvio, el de las cuotas en las carreteras de cuatro carriles es un tema que no aparece para nada en el discurso oficial y cree la autoridad actual que lo han olvidado los veracruzanos, tanto los que sufragaron a favor como los que lo hicieron en contra o se abstuvieron.
Y a ello hay que agregar que el libramiento de Xalapa a Perote se encareció también de manera escandalosa.
Según esto, las cuotas que se cobran en las autopistas son por dos razones.
Una, es que empresas privadas hicieron esos caminos con sus propios recursos y los usuarios pagan el costo de recuperación al utilizarlos. Así, muchas empresas constructoras han estado cobrando por años, aunque parece que son deudas que nunca se van a cumplimentar, porque hasta la fecha no se sabe de ningún camino que haya sido saldado completamente y que por ende se haya vuelto gratuito.
La otra razón es que Caminos y Puentes Federales de Ingreso (Capufe) hace un cobro para aplicarlo en el mantenimiento de sus autopistas, con lo que deberían estar debidamente conservadas y en perfecto estado.
Pero no es así.
El colmo siempre ha sido la carretera de La Tinaja a Coatzacoalcos, que al peligro de tantos asaltos y accidentes que hay en ella se suma el de una cinta asfáltica llena de baches y de hoyos.
Y ahora la estatal de Plan del Río a Cardel.
No sé qué piensen los funcionarios del Gobierno de Veracruz, pero esa carretera que es estatal tiene ya varios meses que no ha obtenido el beneficio de la compostura y está cada día peor. El carril de baja velocidad está prácticamente dañado en todo el recorrido, y no hay raya blanca en un buen tramo, que es precisamente en la zona en que hay neblina.
A la promesa incumplida de que se quitaría el cobro, el Gobierno de Cuitláhuac está aumentando el mal de que no se vigila que haya un mantenim9iento adecuado.
¿A dónde se irá todo ese dinero que pagamos los usuarios?
Pero el Gobernador es un hombre honesto, según dice el Presidente.
sglevet@gmail.com