* La calificó de inmoral, de doble discurso, de hipocresía y difamatoria.
04/07/2022/Ciudad de México.- Una vez más los Obrador arrancó la semana atacando a la prensa mexicana pues dijo que casi todos los medios llevan a cabo una campaña de desprestigio en su contra.
“Una campaña inmoral…difamatoria…y son casi todos los medios de comunicación con honrosas excepciones”, enfatizó en su conferencia diaria.
“Ayer estaba yo viendo… No me acordaba, pero a pesar del COVID todavía no olvido cosas. Hace como dos años fui a Campeche y salió Alazraki a decir que se casaba mi hijo Andrés en una hacienda, de estas antiguas, remodeladas, haciendas coloniales famosa”, contó AMLO en una de sus historia para ejemplificar su punto.
“Y pues no se ha casado, pero lo que me llamó la atención… ¿Se acuerdan lo que últimamente decía, de que lo que importa es decir mentiras? Hay que mentir, hay que mentir, hay que mentir, por eso lo de Goebbels. Puede ser que no sea hitleriano, pero sí alumno de Goebbels, y Goebbels, ya lo dije, pues fue durante muchos años el ministro de la propaganda de Hitler.
“A ver si no encuentras lo de cuando dice… Porque esa es la estrategia, si se le puede llamar así, es la máxima del hampa de la política y del periodismo: la calumnia cuando no mancha, tizna, y calumnia porque algo queda. Y estaba… Sí, es Goebbels, hay hasta manuales sobre eso, pero desde antes se aplicaba eso en el periodismo, se usaban muchísimo en la época de la dictadura porfirista, antes de la Segunda Guerra Mundial”.
“Es una donde dice, a ver si la encuentran, dice: ‘Me equivoqué, no se va a casar el hijo de Andrés Manuel; todo por las benditas redes sociales’.”.
Sobre la agresión al sacerdote por parte de los sicarios que defienden, López Obrador refiere que no tiene información al respecto pese a que el hacho se hizo viral desde la noche anterior y evadió decir más o condenar el hecho.
Por tercer día atacó de nuevo a Carlos Alasraky pero ahora evitó decir que era hitleriano y dijo que era sólo alumno de Goebbels y era “un calumniador Profesional.
¿Tienen lo de Alazraki? A ver, pon lo de Alazraki y luego la lámina sobre inflación energética en el mundo, le indicó a Jesus Ramírez Cuevas su vocero, para luego insultar a la prensa.
“Y ofrecemos disculpas, porque ya nos dedicamos a presumir mucho, pero, si no, los de la prensa fifí conservadora, reaccionaria y corrupta siguen y siguen y siguen tratando de confundir.
“Ah, aquí está, miren, fíjense:‘Las humildes fotos de la humilde boda de Anderecito junior, ayer en Campeche, Hacienda Uayamón. Cada noche entre seis mil y ocho mil pesos. No hay duda, primero los pobres.’ Este es este señor, ¿cómo se llama?, Alazraki”.
“Y como pues no hubo boda ni se usó el hotel este de seis mil la noche, ocho mil… Fíjense, a los dos días, es la vieja perversidad, cuando empezaron a ceder los medios ¿no? con el derecho de réplica primero eran ocho columnas ¿no?, para difamar, y luego, si acaso aceptaban la réplica, mandaban el escrito a la página 38 de la sección C del periódico.”
“Pero aquí se… Dos días calumniando. Es un calumniador profesional, alumnos de Goebbels”.‘Fui víctima de las —dice después— de las benditas redes sociales. Subí una información que me llegó sin validar que fuera cierta.’
Y respecto a que Alasraky lo comparó primero con Hitler cuestionó la postura.
“Se está en el debate y dice: ‘No me insultes, pero no me insultes, me estás insultando’ No, no, no estoy insultando, es que hablo así. ‘Pero tú me insultaste, tú me pegaste primero, tú iniciaste, tú fuistes’.
A ver si la encuentras. Es lo mismo, para que vean la hipocresía, y aclaro… No, pero es… son sus palabras, es una entrevista, son propias palabras diciendo primero una cosa y luego quejándose”.
Acotó que tiene un profundo respeto a la comunidad judía, profundo respeto a la comunidad judía y tengo muy buenos amigos en la comunidad judía; esto es otro asunto completamente distinto.
Es un poco lo de la Iglesia, yo fui atacado por la Iglesia o, para decirlo con precisión, por algunos jerarcas de la Iglesia en el 2006, que hicieron campaña en contra. Un cardenal, que está ahora jubilado, fue a decir a Roma, al embajador de Estados Unidos en Roma, de que yo era un peligro para México y que tenía el gobierno de Estados Unidos que intervenir para frenar nuestro movimiento.