Por Yamiri Rodríguez Madrid
Una noticia triste para Veracruz, que pasará como uno de los capítulos más lamentables de nuestra historia, es el escrito este miércoles 9 de septiembre, cuando alcanzamos los primeros 30 mil contagios de Covid19. Más del 10 por ciento de los enfermos ha muerto a consecuencia de esta pandemia y, más duro aún, es que esto todavía va para largo.
El confinamiento inició en el mes de marzo, pero conforme transcurren las semanas, los muertos se van multiplicando con mayor rapidez. Así, el 9 de mayo el número de decesos era apenas de 120; para el 9 de junio aumentó a 838 y para el 9 de julio a 1, 925. El mismo día, del mes pasado, fueron 3078. Con esa velocidad cobra vidas la enfermedad en nuestro estado.
La próxima semana son los festejos patrios. No faltará la autoridad municipal que se atreva a realizar una verbena popular para conmemorar a los héroes patrios; tampoco los irresponsables que en casa organicen una noche mexicana con amigos y familiares, como si fuesen inmunes al contagio.
No se recuerda tragedia tan dura en Veracruz en los últimos 100 años. En enero de 1920 un sismo de 6.4 grados en la región de Teocelo y Coatepec, provocó una avalancha de lodo que sepultó comunidades y dejó como saldo 650 muertos. El Covid19 va mermando a las familias veracruzanas. Todos los días, en entornos más cercanos, nos enteramos de un amigo o familiar enfermo, de la muerte de alguien que conocimos.
Hay que reconocer, en estos más de seis meses, como decía en una charla hace unos días el presidente municipal de Alvarado, Bogar Ruiz Rosas, a todo el personal municipal que ha incluso arriesgado su salud tratando de evitar que los contagios se multipliquen. Como ejemplo citó que en su tierra todo el personal de Protección Civil se contagió. Así como en Alvarado, están los 212 municipios, por lo que bien vale aplaudir el trabajo de todas esas mujeres y hombres de los que muy poco hablamos.
El Frente Frío número 2 ya está en el territorio veracruzano. Las bajas temperaturas iniciarán y, con éstas, las enfermedades propias de la temporada, como la influenza; una combinación que esperemos no resulte mortal. No bajemos la guardia, sigamos tomando las medidas necesarias, guardando la sana distancia para convertirnos en parte de esta lamentable estadística.
@YamiriRodriguez
