ColumnaSinNombre
Pablo Jair Ortega
+ Marlon no se desmarca.
+ Desacreditado diciendo verdades.
+ Huyendo como rata el “Fiscal Carnal”.
¡Oye, Cáscara! ¿Pero la lucha sigue, veá, loco?
–Chopenjawer
El 12 de agosto, en su lujosa y millonaria mansión de El Estero, el clan Yunes hizo una reunión para juntar a sus aliados y darle un “empujoncito” a su candidato Pepe Mancha, a quien el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) le revocó la dirigencia estatal del PAN por irregularidades en las elecciones internas.
En su mensaje (al puro estilo de Miguel “Chiquito”: bélico y arrogante) dijo que le iban a partir la madre a MORENA, marcando desde ahí la línea que sus simpatizantes tomaron como bandera de campaña: que el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Cuitláhuac García Jiménez estaban operando detrás de Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, el otro candidato del PAN a la dirigencia estatal.
Lo anterior, sinceramente, es una falacia y la muestra está en los tropiezos y torpezas que mostraron desde que no pudieron tumbar al entonces fiscal general, Jorge Winckler Ortiz, al grado de que tuvo que intervenir alguna mente siniestra desde la Federación para, ahora sí, sacar al abogado y amigo personal de los Yunes de la Fiscalía General del Estado (FGE). Ya ni se diga de los errores que han mostrado a lo largo de este primer año de administración, que ha mostrado a los morenos jarochos como faltos de malicia, colmillo, maña “ulo” que sea… Nadie en los círculos políticos les concede tanta inteligencia; incluso dicen que la estrategia para sacar al fiscal la debe haber operado un priista de viejo cuño y mucho poder.
Pero a raíz de ese mensaje en la casa del Estero, se vino todo en consecuencia como un disparo al pie. Dicen que el más preocupado por el discurso de su retoño fue precisamente el patriarca y que lo mejor pudo haber sido ponerse a buscar a quién podía dejar en prenda para negociar una salida y proteger a su familia.
No por nada, a la accidentada salida de Winckler no se le vio un respaldo público por parte del exgobernador ni tampoco de su “Chiquito”; no se vieron tan aguerridos ni entrones como cuando tomaron el Palacio de Gobierno, movilizándose con sus huestes para ir a apapachar al abogado y amigo de la familia. Hicieron todo lo contrario: se fueron para la sombrita.
Esto quizás no lo vio Winckler en su momento: que la historia de traiciones de los Yunes puede llegar seriamente a comprometerlo, pues en una de esas hasta Yunes lo tiene grabado en el penal de Pacho Viejo haciendo cosas ilegales a internos. Quizás horas después Winckler y su gente se dio cuenta de que estaban solos porque el exgobernador no lo arropó chido o lo hizo de dientes para afuera.
Otro que tampoco hizo mucho ruido fue el PRD en Veracruz, donde se supone son aliados de Winckler, pero haga de cuenta que actuaron como americanistas que se quedaron sin internet luego de que pierden las poderosas águilas en el futbol.
Luego de la remoción de Winckler de la Fiscalía General del Estado –por ejemplo– en la conferencia de prensa se vieron rostros tristes y casi al borde del llanto. Habrá que decir que el shock emocional seguramente los tuvo pasmados: por la mañana tenían el poder, por la tarde no tenían nada y ¡Bolas, el sopetón!: a esconderse entre las cloacas como Gadafi.
Pero dicen que también los rostros desencajados se debían a que se dieron cuenta que a Winckler los estaban dejando solo hasta sus propios aliados, pues hasta el momento de redactar esta información, los aguerridos diputados del PAN en el Congreso del Estado sólo fueron a pararse a hacer el ridículo afuera del Palacio de Gobierno, pero ya no se les han visto otras acciones para apoyar al “amiguis” que tenían en la Fiscalía.
“Haiga sido como haiga sido”, la realidad es que la salida de Winckler fue el primer gran golpazo para el Yunismo; les tumbaron el último reducto de poder en Veracruz. También se les fue quien podía haber sido un gran apoyo para las elecciones internas del PAN de este domingo, pero conociendo la historia de traiciones de los Yunes no duden que lo puedan empinar o ya lo hayan empinado con tal de salvaguardar al clan.
Otro error del hijo del exgobernador ese día en El Estero, es que en su mensaje partió al PAN en bueno y malo; es decir, lo dividió y de ahí anunció (sólo los niños, los borrachos y otros seres que no recuerdo, dicen que lo van a hacer) que le partirían la madre a MORENA.
Tanto así la regó el mayorcito de los Yunes, que mejor hicieron a un lado a Mancha y fueron ellos quienes encabezaron mejor la campaña con la esperanza de que así pudieran mantener parte de su poder dentro del comité blanquiazul estatal; no obstante, pese a la guerra de excremento que se esperaba, en realidad las campañas fueron muy tranquilas, con volumen muy bajo y tono casi apagado.
Este domingo por la noche, llegaron unos resultados que finalmente mostraron la derrota no de Pepe Mancha, sino de los Yunes: 9 mil 886 votos para Joaquín Guzmán (52.8%); 8 mil 824 votos para Pepe Mancha (47.2%); con una participación de los militantes del 80%.
En suma, la salida de Winckler de la Fiscalía General del Estado y la derrota de Pepe Mancha como aspirante a la dirigencia estatal del PAN, son dos golpes muy fuertes para el Yunismo que durante 20 años se ha servido de ese partido para cargos y negocios. En teoría, para los Yunes se les complica el escenario para que dentro de 5 años vuelvan a buscar la gubernatura.
También habrá que decir que los Yunes no están muertos; tienen recursos, estructura, contactos, pero sobre todo también mucha soberbia y falta de voluntad para quitarse ese aire de engreídos a lo Gordolfo Gelatino… ¡Aaaaay, maaadreeee!
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Que en el PRI, la base ya está viendo con malos ojos al dirigente estatal, Marlon Ramírez, por aquello de que no se desmarca oportunamente de los señalamientos de que es sólo un títere más de los “Yunes Azules”. Su defensa a Winckler sólo lo evidenció más en este sentido. Es más, ni siquiera, al cierre de esta información, hubo un posicionamiento respecto a la derrota de los Yunes en el PAN; ni siquiera una crítica a la manera en que se desarrollaron las elecciones… A ver si el PRI no acaba como el suripanto PRD veracruzano.
OTRA NOTA: Que el texto enviado por el exgobernador Javier Duarte (ahora metido a columnista, chale) cimbró a los Yunes con las revelaciones de cómo pactaron para hacerse del poder. Allá en el Altiplano dicen que es un “desacreditado diciendo verdades”.
LA ÚLTIMA PORQUE ME ESTÁ DANDO CRUDA EN VIDA: Que en la zona de Veracruz-Boca del Río causó mucho revuelo un video que circuló en redes sociales donde se ve una parodia al “Canal 5, al servicio de la comunidad” pidiendo la colaboración del público para la localización del Fiscal Anticorrupción, Marcos Even Torres Zamudio, considerado el poder tras el poder en la Fiscalía General del Estado y gurú del Winckler: que pena ajena por un abogado conocido por prestigioso ahora se ande escondiendo, huyendo como rata del barco “Fiscal Carnal”.
@pablojair
pablojair@me.com