*Una especie de práctica deshumanizante de tiro al blanco, denuncian.
/ Andre Damon / Foto @etarrago/
Al menos 600 palestinos han sido asesinados en las últimas cinco semanas durante distribuciones de alimentos operadas por la “Fundación Humanitaria de Gaza” (GHF, por sus siglas en inglés), respaldada por Estados Unidos e Israel, informó esta semana la oficina de medios del gobierno de Gaza.
Las matanzas ocurrieron en más de 20 masacres separadas, las cuales se han vuelto una ocurrencia casi diaria como componente clave del genocidio en curso en Gaza.
El miércoles y jueves, Associated Press y la BBC publicaron informes, basados en entrevistas de primera mano, que revelan que contratistas militares privados estadounidenses trabajando para la GHF abrieron fuego contra civiles palestinos, contradiciendo las afirmaciones de la GHF, Estados Unidos e Israel de que los contratistas no habían participado en las matanzas.
Los informes de AP y la BBC presentan un panorama de las distribuciones de ayuda como una especie de práctica deshumanizante de tiro al blanco, en la cual los empleados “humanitarios” se ríen mientras matan civiles y se animan entre ellos a cometer violencia.
Un exempleado que habló con la BBC dijo que a los contratistas se les otorgó libertad para matar con total impunidad. “Vamos a entrar en Gaza, así que no hay reglas. Haz lo que quieras”, le dijeron. Y añadió que le indicaron: “Si te sientes amenazado, dispara… dispara a matar y haz preguntas después”.
Según dicha fuente, los palestinos eran referidos por los contratistas estadounidenses como “hordas de zombis”, “insinuando que estas personas no tienen ningún valor”.
AP informó: “Cada contratista estaba equipado con una pistola, granadas aturdidoras, gas lacrimógeno y un fusil automático de fabricación israelí capaz de disparar decenas de proyectiles en cuestión de segundos, dijo el contratista que grabó los videos”.
Cada distribución de ayuda se acompaña regularmente no solo con municiones letales, sino también con granadas aturdidoras y balas de goma. AP informó: “Durante una sola distribución en junio, los contratistas usaron 37 granadas aturdidoras, 27 proyectiles de goma con humo tipo ‘scat shell’ y 60 botes de gas pimienta, según mensajes internos compartidos con AP. Esa cifra no incluye munición real”.
Los informes de la BBC y AP también dan más credibilidad a las acusaciones de que las distribuciones de GHF están siendo utilizadas para identificar personas para ser arrestadas o asesinadas mediante inteligencia artificial. AP informó que “algunas cámaras están equipadas con software de reconocimiento facial”.
En marzo, Israel impuso un bloqueo total de la entrada de alimentos, agua y electricidad a la Franja de Gaza, paralizando las operaciones de las organizaciones humanitarias, incluidas Naciones Unidas y Médicos Sin Fronteras en el enclave. En mayo, la GHF inició sus distribuciones de alimentos, acompañadas de asesinatos masivos casi diarios. El mes pasado, la administración Trump anunció que otorgaría 30 millones de dólares en financiamiento a la GHF.
El martes, más de 150 organizaciones humanitarias emitieron una declaración condenando a la GHF. Declararon: “Concentrar a más de dos millones de personas en áreas aún más confinadas con la esperanza de alimentar a sus familias no es un plan para salvar vidas”.
La declaración añadió: “El sistema humanitario está siendo desmantelado deliberada y sistemáticamente por el bloqueo y las restricciones impuestas por el Gobierno de Israel, un bloqueo que ahora se utiliza para justificar el cierre de casi todas las demás operaciones de ayuda a favor de una alternativa mortal, controlada por el ejército, que ni protege a los civiles ni cubre necesidades básicas”.
Y concluyó: “Bajo el nuevo esquema del Gobierno israelí, personas hambrientas y debilitadas son forzadas a recorrer durante horas terrenos peligrosos y zonas activas de combate, solo para enfrentarse a una carrera violenta y caótica hacia sitios de distribución cercados y militarizados con un único punto de entrada. Allí, miles de personas son liberadas en recintos caóticos para luchar entre sí por suministros alimentarios limitados”.
La semana pasada, el periódico israelí Haaretz publicó una investigación basada en entrevistas con soldados israelíes, quienes afirmaron haber recibido órdenes reiteradas de abrir fuego contra multitudes desarmadas de personas en busca de ayuda durante una operación cuyo nombre aparentemente hace referencia al homicida juego “luz roja, luz verde” de la serie ficticia El juego del calamar.
En una entrevista con Al Jazeera, el doctor Mads Gilbert, médico en emergencias que ha ejercido durante décadas en Gaza, afirmó que la operación de la GHF “forma parte del plan de las fuerzas armadas israelíes y el Gobierno de Israel para llevar a cabo una limpieza étnica y cumplir su objetivo de cometer un genocidio en Gaza”.
Agregó: “La organización de distribución busca usar la comida como cebo para atraer a personas hambrientas, aterrorizarlas y matarlas. Dispararle a la gente en las filas de alimentos es un crimen de guerra”.
Al menos 66 niños han muerto de desnutrición en Gaza durante el genocidio EEUU-Israelí, informó este fin de semana la oficina de medios del gobierno gazatí, mientras el hambre masiva se dispara en el enclave sitiado.
Solo en junio, más de 5.000 niños de entre 6 meses y 5 años han sido diagnosticados con desnutrición. Esto representa un aumento del 50 por ciento con respecto a mayo y del 150 por ciento con respecto a febrero.
El martes, el medio israelí Maariv informó que el mes pasado, al regresar de bombardear Irán, pilotos israelíes arrojaron su armamento no utilizado sobre Gaza, permitiendo que continuara la matanza masiva a pesar de la ofensiva contra Irán.
Más de 300 palestinos fueron asesinados por tropas israelíes en los últimos dos días, dijo el jueves la oficina de medios del Gobierno de Gaza. Los ataques ocurrieron en toda la Franja, e incluyeron campamentos de refugiados, viviendas y mercados.
El miércoles, el doctor Marwan al-Sultan, director del Hospital Indonesio, fue asesinado en un bombardeo israelí contra su vivienda en el oeste de Gaza.
Desde octubre de 2023, Israel ha asesinado al menos a 57.000 palestinos en Gaza, y es probable que la cifra real sea mucho mayor.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 3 de julio de 2025) en wsws.org
