Masacres en Oaxaca y feminicidio de la pequeña Noelia desatan indignación nacional #ViolenciaFeminicida #Oaxaca

*Tan solo en 2025, hasta el mes de octubre, se contabilizaban al menos 68 asesinatos de mujeres con características de feminicidio en la entidad que “gobierna” Salomón Jara.

*A ello se suman los asesinatos de al menos 10 defensoras de derechos humanos y lideresas comunitarias, así como el homicidio de cinco alcaldesas y alcaldes en funciones o electos,

12.11.2025 Juchitán, Oax.- Oaxaca vuelve a ser tema nacional e internacional -en sentido negativo- tras la masacre de jóvenes en una comunidad del Istmo y luego el plagio y el funesto hallazgo del cuerpo sin vida de Noelia Daylen, una niña de tan solo cuatro años, asesinada en Juchitán.

Noelia fue secuestrada del lugar en donde un comando armado había matado a su mamá y a otras dos personas a balazos. En medio de la tragedia, su abuelita salió a pedir ayuda en redes y rogó que le devolvieran a su nieta pero lamentablemente la niña fue encontrada sin vida 1 día después del asesinato de su madre.

El feminicidio de la pequeña Noelia se reporta después que el gobierno de Oaxaca presumiera disminución del 1.25% de homicidios dolosos en el Estado, evidenciado que las cifras oficialistas carecen de veracidad.

Estos hechos han detonado una ola de indignación social que pone en evidencia la creciente violencia feminicida y el clima de inseguridad que atraviesa la entidad durante el sexenio del gobernador Salomón Jara, que no ha podido esclarecer los crímenes de alcaldesas y defensoras como Sandra Domínguez, entre otros aspectos de la inseguridad por el control del crimen organizado, también en ese estado.

La noche del lunes 11 de noviembre, un ataque armado en la colonia La Planta, en Juchitán de Zaragoza, dejó como saldo tres personas asesinadas: dos mujeres y un hombre, todos jóvenes. Entre las víctimas se encontraba la madre de Noelia Daylen, quien fue reportada como desaparecida tras el ataque.

La abuela emprendió su búsqueda mientras sepultaba a su hija, la madre de la pequeña atacada con armas de alto poder que el gobernante en turno no explica su presencia en la entidad. La señora suplicaba a los catores la dejaran libre para que se despidiera de su mamá, que yavía en el velatorio tras la balecar que les quitó la vida

El cuerpo de la pequeña fue localizado sin vida al día siguiente, el 12 de noviembre, en un domicilio de la misma colonia. La Fiscalía General del Estado de Oaxaca confirmó que tres personas fueron detenidas por su presunta participación en el crimen, sin mayores detalles.

El asesinato de Noelia ha generado una profunda conmoción. Colectivos feministas, organizaciones de derechos humanos y ciudadanos han exigido justicia y han señalado la responsabilidad del Estado por no garantizar la seguridad de las mujeres y niñas en la entidad.

“Que tu muerte no quede impune”, escribieron familiares y activistas en redes sociales, acompañando imágenes de la menor y consignas contra la violencia estructural.

Este crimen ocurre en un contexto alarmante. Durante el sexenio del gobernador Salomón Jara, iniciado en diciembre de 2022, se han registrado más de 200 feminicidios en Oaxaca, según cifras de organizaciones civiles como Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad.

Tan solo en 2025, hasta el mes de octubre, se contabilizaban al menos 68 asesinatos de mujeres con características de feminicidio. A ello se suman los asesinatos de al menos 10 defensoras de derechos humanos y lideresas comunitarias, así como el homicidio de cinco alcaldesas y alcaldes en funciones o electos, lo que refleja un patrón de violencia política y de género persistente.

La masacre de jóvenes en una comunidad del Istmo, ocurrida el mismo fin de semana, ha sido menos difundida pero igualmente grave. Testimonios locales indican que un grupo armado irrumpió en una reunión comunitaria y abrió fuego contra los asistentes, dejando al menos seis personas muertas, la mayoría menores de 25 años.

Aunque las autoridades han prometido una investigación exhaustiva, hasta el momento no se han reportado detenciones.

La sociedad oaxaqueña, marcada por una larga historia de organización comunitaria y resistencia, ha comenzado a movilizarse. Se han convocado marchas en Juchitán, Oaxaca capital y otras regiones del estado para exigir justicia por Noelia y por todas las víctimas de la violencia feminicida.

Las protestas también denuncian la omisión, impunidad y la falta de políticas efectivas de prevención y protección por parte del gobierno estatal.

Mientras tanto, el Palacio de Gobierno permanece resguardado por vallas metálicas y elementos de seguridad, en una imagen que contrasta con la exigencia de justicia que resuena en las calles.

La tragedia de Noelia y la masacre de jóvenes no son hechos aislados, sino síntomas de una crisis estructural que exige respuestas urgentes y profundas en Oaxaca y en el país.