¡No a la eliminación del Feminicidio!

Alguien como tú.

Gladys de L. Pérez Maldonado.

El 29 de enero pasado, el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, propuso la eliminación del tipo penal de feminicidio del próximo Código Penal Nacional por la dificultad que tiene el Ministerio Público para acreditarlo, y aseguró que para que la procuración de justicia a las víctimas era más conveniente mantener el tipo de homicidio y sólo enlistar en esa figura una agravante con las causales que le corresponden al feminicidio.
Tal declaración causó escozor entre la población femenina del país, lo que hizo recomponer el discurso a la FGR y a través de un comunicado en su página web informó que se analiza proponer que todos los asesinatos de mujeres sean clasificados como feminicidios, con la pena más alta, de 40 hasta 70 años de prisión “todo ello a favor de las mujeres que son víctimas; para que cuenten con un tipo penal sencillo, eficiente y de la mas alta sanción, para lograr la defensa de su vida y la protección de su integridad”.
Esta propuesta de desaparición del delito de feminicidio de la norma penal, es totalmente incongruente con lo dicho y hecho por el gobierno mexicano a favor de la erradicación de la violencia contra las mujeres.
Recordemos que en mayo de 2019, México reconoció -al menos en la firma de convenios- al feminicidio como un grave atentado a las mujeres y junto con la Organización de las Naciones Unidas, y la Unión Europea, lanzaron la Iniciativa Spotligth México, una alianza estratégica que busca prevenir y combatir los feminicidios y violencia contra las mujeres y las niñas.
Las instituciones aliadas firmaron el acuerdo de cooperación, inicialmente Spotlight se aplicaría en cinco municipios de tres estados: Estado de México (Naucalpan y Ecatepec), Chihuahua (Chihuahua y Ciudad Juárez) y Guerrero (Chilpancingo) y compartiría experiencias con los estados de Veracruz, Puebla, Ciudad de México y Nuevo León.
Este programa tiene una duración de cuatro años y es implementado por seis Agencias de la ONU en estrecha coordinación con el Gobierno de México, autoridades estatales y locales y organizaciones de la sociedad civil y la UE. Así también, se cuenta con la colaboración entre la Secretaría de Gobernación, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (CONAVIM), el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) y la Secretaría de Relaciones Exteriores.
No podemos dejar de acentuar que catorce de los veinticinco países con mayor número de feminicidios en el mundo están en América Latina y el Caribe y uno de los más afectado es México.
A menos de un año de la implementación de Spotligth México, surge esta atinada idea del Fiscal General de la República de borrar de la norma penal al feminicidio y tratar el tema de las muertes de mujeres como un homicidio agravado, ¿Cómo queda México ante los ojos de la Organización de las Naciones Unidas y la Unión Europea que están invirtiendo miles de euros en un programa de erradicación del feminicidio en nuestro país -entre otros temas de violencia contra la mujer- cuando el delito en si mismo está siendo eliminado por la procuración de justicia mexicana?.
Detrás de la muerte de una mujer a manos de un hombre, persiste el estereotipo del género masculino de controlar la vida de la mujer, su vida, su cuerpo y sexualidad, al punto de castigar con la muerte a aquellas que no acepten el sometimiento.
Los asesinatos por razón de género, subió 10.30 por ciento durante 2019, con un total de 1 mil 6 víctimas en comparación al año 2018, donde hubo 912. Los feminicidios crecieron en el 43.75 por ciento en territorio nacional.
Desde el año 2014, el Modelo de Protocolo Latinoamericano de Investigación de las Muertes Violentas de Mujeres por Razones de Género recomendó al Estado Mexicano “aplicar las directrices del Modelo de Protocolo de manera sistemática frente a todos los casos de muertes violentas de mujeres, puesto que detrás de cada muerte puede existir un feminicidio, aunque al inicio no haya sospecha de criminalidad”. No obstante, a la fecha no se aplica de tal forma, pues las autoridades se resisten a reconocer en la práctica la presencia de la violencia feminicida, como consecuencia no integran sus carpetas de investigación con perspectiva de género y no las abren como feminicidios.
A la autoridad se le ha salido de control el combate del delito de feminicidio, las cifras denotan falta de preparación con perspectiva de género en la procuración de justicia, corrupción en los operadores del sistema e indiferencia en la protección de la integridad y seguridad de las niñas y mujeres.
Estamos conscientes que este problema no es privativo de México, que es una situación mundial que enfrentamos las mujeres, y que en algunos países no existe el delito de feminicidio en sus leyes, no obstante desaparecerlo en nuestro código penal como tal, aunque se proponga tratar el problema dentro del rubro del homicidio con agravantes, conlleva a la invisibilización del acto machista contra la mujer, violentando la norma constitucional y los compromisos adoptados en los Tratados Internacionales por el Estado Mexicano, además de ser un descalabro en lo alcanzado por el movimiento feminista que aboga por el respeto de los Derechos Humanos de las mujeres.
Por fortuna el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador ya se pronunció en contra de esta propuesta señalando que : “Son cuestiones que vamos a ir resolviendo, pero que consideramos pueden esperar”.
Así las cosas en materia de violencia de género en México, alzamos la voz en un grito desesperado de protección de las niñas y las mujeres mexicanas: ¡No mas muertes por estereotipos patriarcales! ¡No a la eliminación del tipo penal de Feminicidio en las leyes mexicanas!.