Carlos Ferreyra comenta: En un documento que circula por las redes, más que denunciar, se narra el procedimiento de captura de niños y jóvenes para integrarlos al sicariato.
Para mejor comprensión, describe las escuelas patrocinadas por el Cártel Jalisco Nueva Generación donde obvio la materia principal es matar o morir.
Se les indoctrina y se les despersonaliza, tal como si se tratara de un ejército regular. Y de hecho lo es, si admitimos el más nuevo informe, no publicado por el Comando Norte que asevera que sólo dos entidades, Yucatán y Campeche están fuera del control del narco.
Treinta estados son controlados política, económica y socialmente por las bandas organizadas, la principal con fuerzas militares en prácticamente todo el país, es precisamente el CJNG.
La gráfica es añeja pero válida en cuanto a la captación de infantes que son insensibilizados ante sufrimientos ajenos. Matar es parte de todo.
Patético que frente a este panorama, circulen videos de civiles correteando a palos a los soldados o que, en acto muy explícito, un sujeto embozado con un palo en la mano, se acerca al convoy castrense y sin dudar, rompe los espejos laterales de varios vehículos
Los uniformados, con rostro bovino, contienen su furia ante la humillación pero obedecen, no balazos, sólo abrazos…
