Con un mensaje en su perfil de Facebook el periodista Noé Zavaleta dio aviso de lo que llama un divorcio con el Semanario.
“Anuncio importante:
Ayer, después de diez años, la Revista Proceso y yo decidimos dar por concluido el matrimonio que teníamos. La rubrica del divorcio se dio en términos cordiales, con un pacto de caballeros y con una liquidación que casi satisfizo la totalidad de mis requerimientos. No me quería ir, o separar -lo admito-, pero las circunstancias y coyunturas actuales así lo obligaron. La nueva directiva dio facilidades cordiales para mi salida.
Acordamos, en un futuro, continuar en “unión libre” con colaboraciones espontaneas sobre Veracruz.
¿Qué sigue para mí?, concluir un nuevo libro, que espero pronto vea la luz. Buscar nuevos horizontes en algún medio nacional o internacional. Y de mientras, es imperioso y necesario irme de vacaciones un buen rato.
Con la Revista Proceso me voy tranquilo y en paz. Con la frente en alto: Seis portadas y tres libros publicados. Con la seguridad de qué siempre di lo mejor de mí, periodísticamente hablando.
Agradezco infinitamente a Marcela Turati, por haberse fijado en mi trabajo y recomendarme en Proceso.
Gracias totales a Don Rafael Rodríguez por otorgarme mi base en Proceso, por confiar en mi trabajo y apoyar la publicación de mi primer libro para Ediciones Proceso.
Gratitud y lealtad irrestricta a Salvador Corro, quien fue mi guía durante más de ocho años en esa vertiginosa aventura de ser corresponsal de Proceso.
Agradecimiento también a la paciencia de Alejandro Caballero para guiar a un corresponsal novato.
Al actual director, Jorge Carrasco y al subdirector, José Gil Olmos mi gratitud por hacer cordial mi salida y dar las facilidades salariales y laborales para lograrlo.
Besos y abrazos a los amigos de Proceso que ayer me llevaron a cenar y a compartir un par de mezcales demostrándome que somos una familia.
Es cuánto
Noé Zavaleta”.
Éxito para el compañero
