Prosa aprisa
Arturo Reyes Isidoro
Me has de disculpar lector, porque use como encabezado el título de la reconocida novela histórica de Fernando del Paso, que trata sobre la vida breve del Segundo Imperio Mexicano y la suerte de los emperadores Maximiliano y Carlota.
Mi comentario ahora es sobre el Imperio del norte, nuestro vecino, ante una noticia esperanzadora de un reencuentro humanitario que pondría fin a una atrocidad histórica digna de Hitler, cometida por el actual presidente Donald Trump.
Si el candidato demócrata Joe Biden gana la elección presidencial de Estados Unidos el próximo martes 3 de noviembre, en su primer día de mandato firmará una orden ejecutiva para crear un equipo de trabajo que se dedique en forma exclusiva a reunir a los 545 niños inmigrantes que fueron separados de sus familias y cuyos padres no han sido encontrados todavía.
La noticia, según consignó ayer El País México, fue difundida en un anuncio que se transmitió por televisión en varios estados norteamericanos, a cinco días de las elecciones en aquel país.
Los niños, la mayoría centroamericanos, fueron separados de sus padres en la frontera con México por haber querido entrar en forma ilegal al territorio del vecino del norte.
Abogados de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) informaron que 283 menores no cuentan con información alguna que pueda ayudar a localizar a sus padres y que 60 del total fueron separados cuando tenían menos de cinco años, por lo que solo tienen vagos recuerdos de sus lugares de origen y de sus familias.
Imposible no rememorar las crueles escenas de la separación de miles y miles de niños de sus padres judíos que fueron enviados vivos a los hornos crematorios por la locura de Hitler de querer una raza pura, niños que en su mayoría corrieron la misma suerte que sus progenitores.
En Veracruz no podemos ser ajenos al drama de estos hermanos centroamericanos, cuyo único delito ha sido el de huir y tratar de salir de la miseria y de la pobreza, pero también de la violencia, buscando una vida mejor, digna, hermanos que han encontrado en nuestro Estado la generosidad de Las Patronas, de Amatlán de los Reyes, pero también de muchos veracruzanos de otras ciudades y poblaciones.
(Hace 18 años, aprovechando un viaje de trabajo por el sur, pasé a saludar a mi madre Margarita, en Coatzacoalcos, ella de condición muy humilde, fallecida hace casi ocho meses. No me extrañó encontrar en su modesta vivienda a varias personas, hombres y mujeres, descansando en lo que podían, porque sabía de su hospitalidad solidaria. Me explicó. Eran migrantes. Entonces me confió: Quiero que sepas que tienes otra hermana. No te sorprenda si un día te enteras de alguien que no conoces pero que anda con tus apellidos, me dijo. Se había conmovido de una joven centroamericana y esta le había pedido que la legalizara en el país, la registrara como su hija y le sacara un acta de nacimiento. Así lo hizo. Se fue al municipio de Soconusco y ahí lo logró, no sé cómo. La joven siguió hacia el norte y hoy debe vivir y trabajar en Estados Unidos, espero que feliz, mi hermana, al fin y al cabo.)
El anuncio de lo que pasará si gana Biden me ha impactado positivamente. Ruego porque ganen los demócratas y echen al actual troglodita, y ruego porque los 545 niños encuentren a sus padres y los 545 padres recuperen a sus hijos.
Me avergüenza como mexicano que el presidente Andrés Manuel López Obrador le haya ido a hacer el juego a Trump, a prestarse para que lo utilizara como parte de su campaña para obtener el voto latino y nunca hubiera alzado su voz en defensa de esos niños que, algunos, desde 2017 viven confinados sin ninguna esperanza, hasta ahora, sobre su futuro.
Kamala Harris anunció sistema de inmigración “justo y humano”
Pero hay otra noticia esperanzadora vinculada al resultado de la elección del martes próximo en Estados Unidos.
La candidata a la Vicepresidencia, Kamala Harris, anunció que si ganan pondrán fin a la política migratoria de Donald Trump, que terminará también con el programa “Quédate en México”, que tiene varados a 10 mil migrantes centroamericanos y del país en la frontera a la espera de que Washington resuelva su petición de asilo.
Kamala aseguró que Biden impulsará un sistema de inmigración “justo y humano”, contrario al ejercido por Trump, que se basa en “demonizar” a los indocumentados para culparlos de los problemas que enfrenta su país.
“Joe Biden sabe que la migración es una fuente de fortaleza para el país. Como presidente terminará el trabajo de construir un sistema de inmigración justo y humano; la administración Biden-Harris protegerá nuestra frontera, mientras que asegura la dignidad de los migrantes y defiende su derecho legal a buscar asilo, incluido el fin del programa Quédate en México”.
Anunció también que se eliminarán los acuerdos de “tercer país seguro” firmados con El Salvador, Honduras y Guatemala, que obligan a esas naciones a detener las olas migratorias que se dirigen a Estados Unidos a cambio de ayuda económica.
Como se recordará, en mayo pasado, Trump presionó a México para que adoptara esa misma política y para ello amagó con imponer aranceles de 5 por ciento a las exportaciones nacionales hacia ese país. No lo logró pero en cambio el gobierno de López Obrador se comprometió a aplicar medidas para frenar la ola de migración, incluido el despliegue de la Guardia Nacional en la frontera sur.
Si los demócratas ganan la elección se tomará como una derrota para López Obrador por su complacencia con Trump. Y se esperarían consecuencias. Como si algo nos faltara.
¿Cuitláhuac, Modem?
¡Chispas! Porfirio Muñoz Ledo anunció ayer su intención de fundar el Movimiento Democrático de Morena (Modem) al que, según declaró a Azucena Uresti, de Grupo Fórmula, “todo mundo” se está integrando. “La tendencia moral yo no la pierdo”, expresó luego de que el Tribunal Federal Electoral confirmó el triunfo de Mario Delgado. La división en Morena, pues, está totalmente confirmada.