*En marzo un nuevo informe de UNICEF, Plan Internacional y ONU Mujeres destaca que se han logrado avances, pero los esfuerzos siguen siendo insuficientes.
A pesar de los importantes avances logrados en áreas como la educación durante las últimas tres décadas, millones de adolescentes en todo el mundo todavía no asisten a la escuela, están mal preparadas para el futuro, enfrentan deficiencias en los servicios de salud que les salvan la vida y corren el riesgo de sufrir prácticas nocivas como el matrimonio infantil, la mutilación genital femenina, la violencia y el abuso.
Un nuevo informe, “Objetivos de las niñas: ¿Qué ha cambiado para las niñas? Los derechos de las adolescentes en 30 años” , presentado por UNICEF, Plan Internacional y ONU Mujeres analiza cómo han cambiado las vidas de las adolescentes en los últimos 30 años, desde que 189 gobiernos aprobaron la Plataforma de Acción de Beijing en 1995.
Datos clave del informe
Educación, formación y competencias digitales
- A pesar de una disminución del 39% en el número de niñas sin escolarizar en los últimos 20 años, 122 millones de niñas permanecen sin escolarizar en todo el mundo. Las adolescentes de 15 a 19 años en el sur de Asia tienen tres veces más probabilidades que los niños de no estar escolarizadas, empleadas ni capacitadas.
- Casi 4 de cada 10 adolescentes y mujeres jóvenes en el mundo no completan la escuela secundaria superior , y las niñas de entornos rurales pobres y comunidades marginadas tienen aún menos probabilidades de completar la escolarización.
- Si bien el número de adolescentes y mujeres jóvenes analfabetas se ha reducido casi a la mitad en las últimas tres décadas, hoy en día casi 50 millones de adolescentes y mujeres jóvenes no pueden leer ni escribir una frase sencilla.
- Nueve de cada diez adolescentes y mujeres jóvenes en países de bajos ingresos no tienen acceso a Internet , mientras que sus pares masculinos tienen el doble de probabilidades de estar conectados.
Violencia de género
- Casi 1 de cada 4 niñas adolescentes que han estado casadas o en pareja han sufrido violencia de pareja en todo el mundo, y 50 millones de niñas que viven hoy en día han sufrido violencia sexual.
- Más de un tercio de los adolescentes de 15 a 19 años de edad en todo el mundo consideran que está justificado que un marido golpee a su esposa en determinadas circunstancias.
Prácticas nocivas
- La práctica de la mutilación genital femenina está disminuyendo, y países como Burkina Faso y Liberia han reducido a la mitad la proporción de niñas sometidas a esta práctica en los últimos 30 años. Sin embargo, el ritmo mundial de disminución debe ser 27 veces más rápido para alcanzar la meta de erradicación de 2030.
- Hoy en día, las niñas tienen menos probabilidades de casarse antes de los 18 años que hace 25 años. Aun así, 1 de cada 5 niñas en todo el mundo se casa en la infancia. El mayor progreso se ha logrado en el sur de Asia, mientras que América Latina y el Caribe no ha registrado ningún avance en los últimos 25 años.
Salud y bienestar
- A nivel mundial, el número de adolescentes que dan a luz se ha reducido casi a la mitad en los últimos 30 años. Aun así, se prevé que casi 12 millones de adolescentes de entre 15 y 19 años den a luz en 2025. Entre las adolescentes más jóvenes (de 10 a 14 años), para quienes el riesgo de embarazo es aún mayor, se estima que esta cifra supera las 325.000.
- Las complicaciones del embarazo y el parto son la causa de aproximadamente 1 de cada 23 muertes entre adolescentes de 15 a 19 años de edad en todo el mundo.
- A nivel mundial, la proporción de adolescentes de 10 a 19 años con bajo peso ha disminuido ligeramente en las últimas tres décadas, del 10 por ciento al 8 por ciento.
El informe pone de manifiesto la urgente necesidad de que se adopten medidas mundiales para liberar el enorme potencial de las adolescentes y formula las siguientes recomendaciones:
- Elevar las voces de las adolescentes y apoyar su labor de defensa para dar forma a la formulación de políticas sobre los temas que afectan sus vidas.
- Centrarse en áreas en las que el progreso se ha estancado y es una máxima prioridad para las propias adolescentes (por ejemplo, cerrar la brecha de educación, habilidades y capacitación para las niñas), teniendo en cuenta al mismo tiempo las nuevas tendencias y actitudes mundiales.
- Utilizar evidencia basada en datos para invertir donde las brechas son más grandes y más urgentes para las adolescentes, centrándose en cambios a escala y en acciones conjuntas y específicas, con un mayor enfoque en el empoderamiento económico y en garantizar que las niñas tengan las habilidades, los activos y los recursos que necesitan para prosperar.
Hoja de cotizaciones
“Las adolescentes son una fuerza poderosa para el cambio global. Con el apoyo adecuado en el momento oportuno, pueden contribuir al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y transformar nuestro mundo”, afirmó Catherine Russell, Directora Ejecutiva de UNICEF. “Invertir en áreas cruciales como la educación, las habilidades, la protección y los servicios esenciales de salud y nutrición puede liberar el potencial de las adolescentes de todo el mundo e impulsar a las comunidades y los países”.
Kathleen Sherwin, Directora de Estrategia y Participación de Plan International, añadió: «Los incansables esfuerzos para combatir la desigualdad de género significan que las posibilidades de que una niña asista a la escuela son significativamente mayores que hace tres décadas, y sus posibilidades de casarse o quedar embarazada durante la infancia son mucho menores. Hay mucho que celebrar, pero al mismo tiempo, este progreso es frágil, desigual y está constantemente amenazado. Demasiadas niñas siguen sufriendo discriminación y abuso a diario, simplemente por ser jóvenes y mujeres. Nuestra labor para lograr la igualdad de las niñas debe continuar, trabajando con niñas, mujeres y sus aliados en todo el mundo».
“Demasiadas adolescentes aún enfrentan violencia, educación limitada y falta de servicios de salud. Nuestra promesa de no dejar a nadie atrás exige acciones urgentes”, declaró Sima Bahous, Directora Ejecutiva de ONU Mujeres. “Hemos avanzado mucho, pero aún queda mucho por recorrer para que se reconozca y proteja el potencial de cada niña. Empoderar a todas las adolescentes es la inversión más segura en un mundo más sostenible, equitativo y pacífico”.