Ricardo Alemán
La siguiente historia parece sacada de una mala película de policías y ladrones.
Resulta que la red social Facebook aparece involucrada, de nueva cuenta, como parte de un gobierno que promueve la censura para mantener su engaño a los ciudadanos.
Lo ridículo del asunto es que esa red social –como casi todas las de su género–, se presentan ante los ciudadanos como poderosos instrumentos capaces de dotar al ciudadano de todas las libertades imaginables.
Sin embargo, en la realidad son empresas de doble rostro a las que sólo importa monetizar sus servicios.
Por eso se venden al mejor postor; sean gobiernos dictatoriales, sean grupos radicales o, de plano, sectores sociales engañabobos.
En cualquier caso, Facebook, igual que muchas empresas globales, no es más que un instrumento rapaz, capaz de ponerse al servicio del mejor postor.
Así, Facebook reacciona obediente a los grupos al servicio de gobiernos sátrapas y dictatoriales, como el de López Obrador, cuyos fanáticos denuncian una cuenta que les resulta incómoda y la red social la suspende sin hacer la menor revisión de a quién están sirviendo; sea un fanático político, religioso o un profesional en la siembra de odio.
Y viene a cuento el tema porque en días pasados cobró importancia el mensaje siguiente, proveniente de la página www.letraroja.com.mx aliada del diario digital Contrapeso Ciudadano, que fue tirada por fanáticos lopistas que pretenden ocultar el fracaso del gobierno mexicano, el de López Obrador, en materia de seguridad.
El mensaje es el siguiente.
“Otra vez censuran la página de Letra Roja en Facebook.
“El 17 de febrero de 2018 nuestro portal Letra Roja fue víctima de un ataque cibernético. Publicamos una nota sobre la campaña del entonces candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador y una horda de seguidores llamaron a bloquear nuestra página.
“Gracias a ese boicot que armaron en redes sociales, Facebook bajó nuestra página sin preguntar ni dejarnos espacio para la defensa. A pesar de que se apeló la decisión argumentando un ataque y censura, ya no regresaron la cuenta que contaba con casi medio millón de seguidores y que se volvía referente de la nota roja.
“La redacción comenzó una nueva cuenta de Facebook para poder compartir el contenido de la página web, empezando con cero seguidores; para el día de ayer teníamos casi 50 mil seguidores. En nuestra información destacan los seguimientos de periodistas muertos, todo el crimen en Guerrero, Tamaulipas, Veracruz y Guanajuato, el narcotráfico en la Ciudad de México y los casos de feminicidios en todo el país.
“El día de hoy nuevamente hemos sido víctimas de un ataque. El perfil de Facebook Letra Roja Mx, ha sido dado de baja de la red y, al mismo tiempo bloquearon las cuentas de todo el equipo de redactores y comunity managers que laboran en el portal.
“Por eso, en esta ocasión la pregunta es directa para el Presidente, Andrés Manuel López Obrador, ¿por qué nos censuran? ¿no quiere que se sepan los casos de feminicidio? ¿no quiere que sepa cómo domina el crimen organizado en los estados? ¿no quiere que denunciemos el narco, la corrupción y la impunidad en la Ciudad de México? ¿qué es lo que le incomoda?
“Lo más extraño es que una plataforma como Facebook se preste a este juego de censura y bloqueo. Que a pesar de ser un monstruo mundial, no tenga los más mínimos estándares para garantizar que los medios de comunicación tengan total libertad de expresión cuidando las normas que ellos mismo imponen. Más en un país, donde la crítica es mal vista y dónde sólo los que hacen preguntas a modo reciben respuestas.
“En más de una ocasión, Andrés Manuel López Obrador ha dicho que en México hay libertad de expresión, pero ¿dónde está? ¿para quién es? ¿por qué no cumple su palabra? ¿por qué nos censuran, Presidente?
“Ofrecemos una disculpa a nuestros seguidores y dejamos claro que la información se seguirá compartiendo en redes sociales, que seguiremos pendientes de los feminicidios y que daremos puntual seguimiento al crimen organizado que tiene hundido al país… #NoNosVanACallar”. Hasta aquí la cita.
Y, en efecto, los fanáticos de una dictadura en formación, como la de López Obrador, puede engañar a muchos mucho tiempo, pero no engañaran a todos todo el tiempo; y no engañaran a millones de usuarios mexicanos de la red social Facebook.
¡Se los dije!
