Por Yamiri Rodríguez Madrid
Un reducto de panistas de la capital veracruzana no ve más allá de su interés de grupo e insisten en ir solos en la búsqueda de la presidencia municipal, llevando al diputado local Sergio Hernández Hernández. Uno de estos es su padre de crianza, Martín Espinoza Roldán, quien es por cierto Presidente del Comité Municipal del PAN en Xalapa. Evidentemente, su mayor interés no es que los ciudadanos puedan resolver sus problemas, sino que su muchacho llegue a la silla municipal.
En un intento de estrategia política, al otro día salieron otros convidados: los integrantes de la planilla de Hernández Hernández. Gabriela Gómez Flores, quien fungiría como Síndica insistió que aun cuando a nivel nacional y estatal hay acuerdos para la alianza PAN-PRI-PRD, a nivel municipal el consenso general es competir solo como PAN.
Y digo que es intento de estrategia, porque desde el momento en que el papá de Sergio Hernández toma la voz, pierde legitimidad. Que se le sume quien aspira a un cargo junto con él, tampoco les da credibilidad.
Es cierto que Sergio Hernández se puso listo, y cuando fue de los consentidos del yunismo, acaparó la mayor cantidad de fichas que pudo; de ahí que Martín Espinoza esté en el comité municipal; pero de eso a que pueda nadar victorioso en un estanque de tiburones, hay una diferencia abismal. Si se empecinan en que Sergio Hernández sea el candidato del PAN, corren el riesgo de que se desplome a un cuarto o quinto lugar en la contienda.
El voto duro no es suficiente para la elección que está en juego.
Ya no tiene al gobierno de su lado, por ende, sus recursos serán más que limitados.
No tiene la trayectoria ni la estatura de otros actores que estarán en la boleta. Al morenista Ricardo Ahued no le hará ni cosquillas. El priista David Velazco Chedraui solo alcanza a ver a Sergio por el espejo retrovisor. En un debate, el ex rector de la Universidad Veracruzana (UV), Raúl Arias Lovillo, hoy del Movimiento Ciudadano, lo haría trizas y hasta su ex compañera de bancada, Cinthya Lobato Calderón le sacaría ventaja.
¿El abanderar la alianza del PRI, PAN y PRD? Mejor que ya de una vez le den el triunfo a Morena.
Si aún con estos considerandos está dispuesto a jugar, hay que reconocer su valentía mezclada con necedad. Nada más no le vaya a pasar a él y a su grupo, como al perro de las dos tortas….
@YamiriRodriguez