Rosa Marta Abascal Olascoaga
Pocos temas han movilizado de forma más profunda y contundente el corazón de la sociedad mexicana, como el riesgo de perder un árbitro imparcial, referente de la defensa del voto y de la democracia a nivel nacional e internacional, como es el INE.
La independencia del INE ha garantizado autonomía, legalidad, imparcialidad, transparencia y objetividad en las elecciones, pues sus consejeros son capaces de tomar decisiones libres de presiones partidistas o políticas, con el único objetivo de garantizar el respeto al voto ejercido por los ciudadanos.
La credibilidad y transparencia, la eficiencia y el profesionalismo con los que el INE opera han impulsado la participación ciudadana responsable e informada con la certeza de que el instituto es garante de piso parejo y de defensa de su voto. Gracias al INE, llevamos un larguísimo periodo de estabilidad política, gobernabilidad democrática y alternancia; muestra de ello es que desde el nacimiento del IFE, hoy INE, tres partidos han gobernando.
Termina un brillante ciclo para el INE, se van Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, valientes, comprometidos y ejemplares defensores de la democracia. Dentro de algunos años los valoraremos como actores fundamentales de la consolidación democrática de México.
Comienza una nueva etapa cargada de retos y oportunidades. Mucho se ha hablado de Guadalupe Taddei en relación con sus vínculos familiares con militantes de un partido político. Me resisto a juzgar a una persona por lo que otros, amigos, familiares, cercanos o socios, hayan hecho. No solo me parece injusto, es agresivo y fuera de lugar. Nadie merece un trato de esa naturaleza. Solo nuestros actos y decisiones nos pueden definir.
Entendiendo la naturaleza y fortaleza de nuestro INE ciudadano, desde Coparmex llamamos a dar un voto de confianza a los nuevos consejeros Jorge Montaño, Rita Bell López, Arturo Castillo y Guadalupe Taddei, esperando de ellos la altura de miras, la capacidad y el amor por México que demanda una responsabilidad de la magnitud de la que están asumiendo. En manos de ellos, y de los siete consejeros que se mantienen, está el cuidado, fortalecimiento y el futuro de la democracia mexicana.
Los ciudadanos esperamos de todos los nuevos consejeros, y en particular de su Presidenta, fortaleza y magnanimidad frente a las descalificaciones injustas, abusivas y arbitrarias de las que seguramente el INE seguirá siendo objeto.
La Consejera Presidenta tendrá un gran reto al asumir el rol de liderazgo fundamental para el INE, representándolo y además siendo responsable de la coordinación y supervisión de los consejeros electorales y del trabajo administrativo y técnico del instituto. Los consejeros electorales tendrán un rol más centrado en la toma de decisiones y en la garantía de la legalidad y la transparencia en los procesos electorales, igualmente relevantes. Los ciudadanos seguiremos atentos para fortalecer y consolidar al INE y a nuestra democracia.
El plan B está suspendido hasta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación defina su consitucionalidad o inconstitucionalidad. Los ciudadanos confiamos en que la Corte tomará la mejor decisión, seguimos vigilantes para robustecer a la institución mejor evaluada y que más nos representa como mexicanos.
La ola rosa, la defensa del voto, es nuestra prioridad. Este INE que se ha convertido en el corazón de México es el INE por el que seguiremos dispuestos a trabajar, luchar y defender. #PorAmorAMéxico defenderemos al INE, #PorAmorAMéxico participaremos, #PorAmorAMéxico saldremos a votar, pues cuando la sociedad alza la voz y defiende sus derechos y conquistas democráticas, cualquier atentado o agresión contra el INE están condenados al fracaso.
La autora es Vicepresidenta Nacional de Comunicación de Coparmex.