Proceso no es víctima indirecta por asesinato de Regina Martínez: Suprema Corte

Foto Multigráfica

*Escrito por Berenice Chavarría Tenorio.  

13.10.2023 /CimacNoticias.com/ Ciudad de México.- La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) confirmó la sentencia en la que se niega a la revista Proceso ser reconocida como víctima indirecta dentro del proceso penal que se sigue por el homicidio de la periodista Regina Martínez Pérez, asesinada el 28 de abril de 2012, cuyo caso continúa en impunidad pese a que en 2020 el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a reabrirlo y brindar justicia a la reportera, quien fue víctima de feminicidio por el ejercicio de su labor, lacerando así su entorno y la seguridad de sus colegas en un país donde esta profesión es una de las más riesgosas.

Regina Martínez se dedicó a investigar temas como la corrupción, la desaparición forzada, el crimen organizado y el arrebato de tierras a comunidades indígenas como corresponsal del semanario Proceso en Veracruz durante casi una década.

Las investigaciones por su asesinato se dieron por concluidas en octubre de 2012 sin reconocer su labor periodística como una de las principales razones detrás del caso, incluso una de las investigaciones apuntaba a un “crimen pasional” como la razón detrás de su feminicidio.

Un medio de comunicación no puede ser considerado víctima indirecta: SCJN

El pasado mes de abril de este año Proceso dio a conocer que un tribunal colegiado turnó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación su solicitud para ser reconocido como víctima indirecta y así seguir colaborando en el esclarecimiento del feminicidio.

Sin embargo, este 11 de octubre la Primera Sala de la SCJN revisó la sentencia de amparo en contra de una determinación ministerial en la que no se le reconoció como víctima indirecta a la revista dentro del proceso penal por el caso Regina Martínez.

CIMACFoto: Diana Hernández Gómez

En su demanda, la empresa editorial sostuvo que, con esa determinación, se vulneraron sus derechos de acceso a la justicia y a la libertad de expresión. En este sentido, solicitó la interpretación pro persona de la Ley General de Víctimas, con el objeto de que el concepto de “víctima indirecta” se amplíe e incorpore a los medios de comunicación.

Una vez analizado el tema por la Primera Sala de la SCJN, esta determinó que Proceso, aún sin el reconocimiento específico de “víctima indirecta”, ha tenido la posibilidad de aportar elementos de investigación y no fue limitada para coadyuvar en el esclarecimiento de los hechos.

Por lo que se confirmó la sentencia impugnada y se negó la protección constitucional solicitada al medio, es decir: Proceso no será considerado una víctima indirecta en el caso de Regina Martínez.

“El Alto Tribunal determinó que en el asunto analizado resultaría erróneo reconocer las consecuencias negativas de este tipo de delitos únicamente para un sector poblacional, pues con ello, se excluiría categórica e injustificadamente a otros sujetos que también pudieron haber sido afectados. Esto es, aunque el medio de comunicación esté en aptitud de alegar una vulneración a su derecho a la libertad de expresión derivado del asesinato de su corresponsal, lo cierto es que ese argumento no es suficiente para estimar que se materializa un daño que menoscabe su esfera jurídica de forma diferenciada del resto de la sociedad y que le permita su reconocimiento como víctima indirecta dentro del proceso que aún se sigue”, sentenció la Primera Sala.

11 años de impunidad 

Durante el aniversario del asesinato de Regina Martínez, Cimacnoticias documentó que la relación entre la muerte de Regina y su labor periodística, es clara para sus excompañeros y amigos. Y el riesgo de ser periodista también fue claro para Regina desde un inicio.

De acuerdo con su amiga, la periodista veracruzana Norma Trujillo, este riesgo permanente llevó a Martínez Pérez a tomar una actitud siempre reservada en lo referente a su vida privada. Regina, por ejemplo, no dejaba que nadie entrara a su casa; además, incluso sus colegas más cercanos no sabían a ciencia cierta de dónde era originaria Martínez.

En las investigaciones de la periodistas quedaron expuestos personajes de la delincuencia organizada, dejó al descubierto los mecanismos de lavado de dinero que operaban así como la relación de estos con funcionarios públicos de Veracruz, como Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa.

Además de estos temas, Regina Martínez dio seguimiento cercano al caso de Ernestina Ascencio Rosario, una mujer náhuatl víctima de violación por parte de miembros del Ejército; también abordó el despojo de tierras y la violencia contra las comunidades indígenas de Veracruz.

Regina Martínez murió luego de que alguien entrara a su casa por la noche y la golpeara hasta quitarle la vida. Según narra Jorge Carrasco, director de la revista Proceso, desde ese momento fue evidente la falta de voluntad de las autoridades de investigar.

Y es que en 2013 un tribunal de Veracruz revocó la sentencia de 38 años y dos meses de cárcel contra Jorge Antonio Hernández, ‘El Silva’, presunto asesino de la corresponsal de Proceso en ese estado.

Siete años más tarde, en 2020, el presidente López Obrador dijo estar “totalmente de acuerdo en que se busque el procedimiento para reabrir el caso. Tenemos ahora condiciones distintas porque no hay contubernio, entonces podemos conocer toda la verdad”. Sin embargo, al día de hoy el asesinato continúa en la impunidad.