¿Qué pasa, Sr. Presidente?…

Güiri Güiri POLÍTICO.
Cevejara.

Transcurridos apenas un año y poco más de dos meses del sexenio 2018-2024. Ocioso y hasta imprudente sería exigirle resultados a tono con su llamada Cuarta Transformación y sus espectaculares promesas de campaña. Con las que ofreció, en un tan sorprendente y contundente discurso de auto suficiencia, que sorprendió a propios y extraños.
Para modelar en tiempo récord, un país muy distinto y distante del que recibiría el uno de Diciembre del 2018. Herencia de la depredadora era conservadora y neoliberal. Treinta millones de de los más de 90 millones de electores que registra la lista nominal del INE votaron por él. Mientras otros 20 millones sufragaron por las demás opciones de la misma nociva por parásita partidocracia. Mientras los restantes 40 millones, fueron como tradicionalmente ocurre, pasto fácil de su majestad; el implacablemente aún invencible Abstencionismo. Pero los peros, con todo y éstos; el triunfo de Andrés Manuel López Obrador de MORENA fue tan arrollador como democráticamente impecable. Así, la mesa quedó puesta con un país servido y puesto en charola de plata para un gran y único distinguido comensal. AMLO, que de inmediato y aún sin haberlo declarado el Congreso Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. Empezó a ordenar y disponer acciones y acuerdos propios del mandatario en funciones, Enrique Peña Nieto y de los otros dos Poderes de la Unión y demás que rigen la institucional vida del país. Peña Nieto, dió en el acto un paso al costado y lo dejó hacer y deshacer hasta la humillación misma. En lo que se interpretó como una negociación muy propia de la política, política ésta, política nuestra, POLÍTICA A LA MEXICANA.
La de dejar hacer y dejar correr. Por eso y por lo mismo, desde allí se supo que López Obrador había empezado a quemar sus naves de combate contra la corrupción y la impunidad. Al previamente quemarle harto incienso al ya por él, purificado aunque escandalosamente corrupto Peña Nieto. Colmandolo de elogios mil, por su enaltecedora figura democrática. Porque él si, el del PRI; dió el aval a su triunfo del 2018. Contrario a los fraudes producto de “compló” que habrían orquestado sus antecesores Vicente Fox y Felipe Calderón del PAN en 2006 y 2012, respectivamente.
Y es el caso y con eso que la historia no miente. Hoy vemos cómo el enemigo incómodo del Ejecutivo Federal ya no es el PRI, su origen. Es el PAN, el que le está dando la batalla en algo así, no como una piedra pero si; una piedrita en el zapato.
En tanto el PRI, nada de nada pues se la ha pasado este primer año, nadando de a muertito cuidando no hacer olas. O lo que es lo mismo. No romper el pacto AMLO izquierda MORENA y EPN centro izquierda PRI, contra la derecha PAN conservadora y su ala ultraderecha agazapada en el Yunque.
En el otro extremo, el presidente AMLO ha moderado como del cielo a la tierra, su agresivo discurso contra la IP que decía en campaña y tiempo después, era beneficiaria de la Mafia del Poder.
Se vio obligado a dar ese giro de 180 grados para atraer sus inversiones que son de vida o muerte para el desarrollo y el crecimiento económico del país. Pero más peros, siempre condicionada a las reglas claras del juego. Para meter su dinero en proyectos rentables, que garanticen ganancias, no pérdidas. Ejemplo el del Tren Maya, uno de los cuatro coincidentes símbolos de la 4T. Al que si le entraron para construirlo, no para la concesión operativa. Guardan zorruna distancia pues. Posiblemente, porque ven riesgos de pérdidas. Un año y más de dos meses en los que, por esos vaivenes propios de ensayos por la ausencia de un definido Plan de Desarrollo Nacional. Se ha perdido valioso tiempo, generando inestabilidad por desconfianza en los mercados nacional e internacional. Y cuya cuesta, propia, no será tan fácil remontar según quienes de eso saben.
Por eso la pregunta: ¿Qué pasa, Sr. Presidente?.

LA FRASE de HOY:- “Se rumora por enésima vez en los Pasillos del Poder diría el maestro amigo César Augusto Vázquez Ghagoya, que ahora sí, vienen cambios en el equipo del gobernador Cuitláhuac García Jiménez’. Comentario:- ¡Pues si, con eso que mucho ayuda el que no estorba! y…

LA PREGUNTA de HOY:- ¿Por qué nadie sabe ni nadie supo explicar en el palacio municipal de Coatzacoalcos y menos el alcalde Victor Carranza, cuántos más de los 160 miembros de la “certificada” Policía Municipal están comisionados para cuidar a ediles, familiares y funcionarios en lugar de proteger a la ciudadanía?.

Respuesta-Comentario: ¡Ésto porque si al titular de Gobernación, el “Mapache” Noe García Jofre que respaldaban tres prepotentes polis que portaban armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y los arrestó la Marina y metió al bote. Es pregunta! y…

HASTA la Próxima… A MI MANERA.

Cevejara…

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