IMSSVerSur. 08 octubre 2020.- En el marco del Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, la Oficina de Representación en Veracruz Sur, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), recomienda a la población femenina, a partir de los 20 años de edad, adoptar la autoexploración de los senos como un hábito preventivo, a fin de identificar con oportunidad alguna alteración y prevenir el desarrollo de alguna tumoración maligna.
La responsable del servicio de Medicina Preventiva, en la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 6, en Ixhuatlancillo, Imelda Hernández Castañeda, explicó que el cáncer de mama tiene altas probabilidades de curación total cuando es detectado a tiempo y se actúa de inmediato para combatirlo, de ahí la importancia de revisarlas frecuentemente.
En el IMSS son permanentes las acciones de orientación sobre el autocuidado de la salud sobre este tema, y durante el mes de octubre se intensifican para sensibilizar a un mayor número de personas, incluidos los varones, ya que también en ellos se presenta el padecimiento, aunque es poco frecuente.
Apuntó que toda mujer mayor de 20 años de edad, debe revisarse los senos, al menos, una vez por mes.
“Antes de bañarse, frente al espejo, observarse detenidamente, levantar el brazo izquierdo y con la mano derecha palpar la superficie en el sentido de las manecillas del reloj, buscando alteraciones en su forma, partes duras, crecimiento o dolor, y posteriormente el seno izquierdo”, comentó.
A partir de los 25 años de edad, aunado a lo anterior, es conveniente que se acerquen a los servicios de medicina preventiva y solicite la exploración clínica, para que el personal médico y de enfermería le revisen las mamas; esta acción se sugiere que sea anual.
La también especialista en medicina de familia destacó que para las mujeres con antecedentes familiares de cáncer, de los 40 años en adelante, deben solicitar que les realicen una mastografía, puesto que son consideradas como población de riesgo por el factor herencia.
El denominado grupo blanco para el IMSS, es decir, al que se enfocan los esfuerzos para sensibilizarlas respecto a la necesidad de que se realicen la mastografía, es el de los 50 a 69 años de edad, ya que el estudio permite detectar anomalías que en la autoexploración o la exploración clínica no son evidentes.
Si los resultados salen sin datos de alarma, se sugiere volver a realizar la mastografía dos años después.
“Si mediante la mastografía se identifica alguna anomalía, la paciente es canalizada de inmediato a los servicios de ginecología para someterla a otros estudios y, en su caso, derivarla a la atención oncológica”, aseguró.
Reiteró que la detección oportuna incrementa en forma considerable las posibilidades de curación total, por lo que el IMSS y el resto de las instituciones de salud despliegan acciones permanentemente para informar a la población, sobre las medidas preventivas y las técnicas que están a su alcance y disposición, para identificar desde el inicio, algún síntoma de alarma.