Reivindicar a don Adolfo

**Sin tacto. 

 / Por Sergio González Levet /

Adolfo Tomás Ruiz Cortines​ nació en el puerto de Veracruz el 30 de diciembre de 1889 y falleció en su ciudad natal el 3 de diciembre de 1973.

Su padre fue un agente aduanal que murió durante el embarazo de su madre y Adolfo creció en la casa de a sus abuelos, junto con su madre y una tía. Estudió apenas la primaria y la secundaria con los jesuitas, y obtuvo un diploma como contador privado.

Trabajaba precisamente es una casa comercial cuando estalló la revuelta en contra del dictador Victoriano Huerta, y se adhirió al movimiento, a las órdenes del general guanajuatense Alfredo Robles Domínguez, con quien inició su carrera dentro del sector público cuando éste fue nombrado Gobernador del Distrito Federal, y continuó en el puesto cuando su paisano Heriberto Jara sucedió a su protector.

Aunque había participado solamente como civil en la revolución contra Huerta, cuando Robles Domínguez se fue como Gobernador del Estado de Guerrero se alistó como oficial de órdenes en el Cuartel General de la División Sur y participó en la batalla de El Ébano en contra de los villistas en San Luis Potosí.

En 1926 se dio de baja del Ejército con el grado de mayor e inició su carrera política en la que fue ascendiendo hasta que fue elegido como diputado federal por Veracruz en 1937. Dos años después se desempeñó como tesorero de la campaña de Manuel Ávila Camacho y en 1949 regresó a Veracruz como Secretario General de Gobierno con el gobernador Miguel Alemán Valdés. En 1941 lo siguió como Oficial Mayor de la Secretaría de Gobernación.

En 1944, Adolfo Ruiz Cortines fue electo Gobernador de Veracruz y duró en el encargo hasta 1948, cuando pidió licencia para irse como Secretario de Gobernación del presidente Alemán.

Dejo que Wikipedia siga diciéndonos quién fue don Adolfo:

“El 14 de octubre de 1951, Ruiz Cortines rindió la protesta como candidato a la presidencia por el Partido Revolucionario Institucional. Ya como presidente, ejerció un severo control del gasto público, apoyó la construcción de caminos, redes ferroviarias, presas, escuelas y hospitales; puso en práctica el plan La Marcha al Mar, con la finalidad de llevar a las zonas costeras los excedentes de la población del altiplano y lograr un mejor aprovechamiento y desarrollo de los recursos marítimos.”

Sí, don Adolfo Ruiz Cortines fue un veracruzano de altos vuelos, de comprobada honestidad​ demostrada con hechos y no con declaraciones ladinas, insulsas o falaces. Gracias a él se mantuvo el milagro mexicano de la economía y gracias a él podemos alardear de decencia en la política mexicana.

…gracias a él, y sólo a él. No hay quien se le acerque, por favor.

 

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