*María Guadalupe Lugo García .
21.11.2024 Ciudad de México.- En el siglo XX las mujeres comenzamos a intervenir de manera importante en la educación superior y, sobre todo, muchas de quienes ingresamos a la Universidad Nacional, a finales de los años 60, “teníamos una característica: nuestra participación en movimientos sociales y feministas”, afirmó la titular de la Coordinación para la Igualdad de Género (CIGU) de la UNAM, Norma Blazquez Graf.
En la inauguración de la exposición temporal Disruptivas. Mujeres en la Universidad, indicó que ello constituye “una huella importante que vale la pena resaltar en una muestra como ésta, porque además de permitirnos hacer honores a las pioneras, también nos da la oportunidad de destacar la existencia de académicas feministas que incorporaron nuevos temas en esta casa de estudios”.
En el Museo UNAM Hoy, a cargo del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE), consideró que no sólo se trata de llegar, permanecer y ser reconocidas, sino igualmente de transformar la Universidad, “pues hemos participado en la transformación de sus espacios, entidades, horarios y presupuestos, en lo más físico y elemental; pero también en los contenidos, en la información de lo que vamos haciendo y en temáticas novedosas que se han generado a partir de la incorporación de las mujeres en todas las áreas del conocimiento”.
Acompañada de la directora del Museo UNAM Hoy, Claudia de la Garza Gálvez y de la investigadora del IISUE, Clara Inés Ramírez González, la titular de la CIGU destacó que otro desafío es seguir trabajando para que en los espacios universitarios se prevenga y erradique la violencia de género, que haya justicia, igualdad y cero discriminación en la UNAM. “Ahora que somos cada vez más mujeres quienes hemos llegado a importantes puestos de decisión debemos empujar para que toda la comunidad participe en ese gran reto”.
En su intervención, la directora del IISUE, Gabriela de la Cruz Flores, resaltó que el propósito de esta exposición es reconocer las aportaciones, historias y luchas de las mujeres en la UNAM, abrir preguntas y crear espacios de reflexión, propiciando conversaciones entre distintas perspectivas, periodos y escenarios socioculturales.
Detalló que la narrativa de esta muestra se conceptualizó a partir de dos ejes centrales: disrupción, que describe las acciones que rompieron con la forma de ejecutar las cosas generación tras generación, en pro de abrir espacios y terminar con la violencia hacia las mujeres. Un segundo eje es el de entramados, mediante el cual se busca visibilizar las genealogías femeninas reconociendo a aquellas figuras femeninas que abrieron nuevos derroteros, “subrayando que sólo a través de la conformación de redes es posible incidir y transformar”.
Entre otros materiales se incluyeron documentos y fotografías del acervo del Archivo Histórico de la UNAM, los cuales se complementan con las colecciones del Archivo Histórico del Palacio de Minería, así como de los museos Vizcaínas y el de Arte Popular, además del acervo de la CIGU y del proyecto independiente “Pinto mi raya”, además de colecciones particulares.
Mencionó que la muestra reúne una serie de voluntades individuales y de instituciones por visibilizar la historia de las mujeres universitarias y plantear sus problemáticas, entre ellas diversas entidades de la UNAM, como el Centro de Investigaciones y Estudios de Género, la CIGU, la Defensoría de los Derechos Universitarios Igualdad y Atención a la Violencia de Género, la Dirección del Deporte Universitario, la Facultad de Artes y Diseño e instituciones externas.
Fiorella Mancini, secretaria académica de la Coordinación de Humanidades, expuso que esta muestra “nos inspira profundamente porque se trata de un espacio que abre puertas a la reflexión del papel de las mujeres en el mundo, nuestros logros y los pendientes que aún quedan”.
Lograr que las mujeres estudiaran sólo para ignorar menos, ha sido toda una revolución paradigmática. En la actualidad, en la Universidad –según la agenda estadística de la UNAM–, hay una matrícula de mujeres equivalente al 52 % de la población estudiantil, refirió.
En ese sentido, la genealogía y la disrupción, me parecen fundamentales para comprender esta exposición y también la historia de lucha por los derechos de las mujeres.
Disruptivas. Mujeres en la Universidad permanecerá abierta hasta el 31 de mayo de 2025, en un horario de 11:00 a 17:00 horas, de martes a sábado. La entrada es gratuita. El museo UNAM Hoy se ubica en Moneda 2, esquina Seminario, Centro Histórico.