Senado aprueba Ley de la Guardia Nacional.

  • Entre otros aspectos, reglamenta las tareas de la Guardia Nacional, sus mandos y promociones.

*Rechazan 15 reservas al dictamen propuestas por senadoras y senadores de PAN, PVEM, PRI y Movimiento Ciudadano.

30.06.2025 Ciudad de México.- El Pleno del Senado de la República aprobó en lo general y en lo particular el proyecto de decreto por el que se expide la Ley de la Guardia Nacional y se modifican ocho ordenamientos para armonizarlos con la reforma constitucional en esta materia avalada en 2024.

 

La asamblea avaló en lo general el proyecto con 75 votos a favor y 34 en contra; mientras que en lo particular obtuvo una votación de 75 a favor y 32 en contra, por lo que el documento fue turnado al Ejecutivo Federal.

 

Se trata del décimo cuarto asunto que desahoga esta cámara como parte de la agenda del Periodo Extraordinario del Congreso de la Unión, que comenzó el pasado 23 de junio, y que en esta fecha coincide con el sexto aniversario de la creación de la Guardia Nacional.

 

El proyecto incluye reformas a diversas disposiciones de las leyes Orgánica de la Administración Pública Federal; Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; de Educación Militar del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; y de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.

 

Además, modificaciones a las leyes del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas; de Disciplina del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; del Código de Justicia Militar; y del Código Militar de Procedimientos Penales.

 

El proyecto de decreto deriva de una minuta remitida por la Cámara de Diputados al Senado de la República, el pasado 25 de junio.

 

Dicho ordenamiento reglamenta las tareas de la Guardia Nacional, sus mandos y promociones, el ingreso a este cuerpo de seguridad, las prestaciones a las que tienen derecho sus elementos y la jurisdicción a la que quedarán sujetos en caso de faltas o delitos, entre otros aspectos.

 

Al fijar el posicionamiento de Morena, Luis Fernando Salazar Fernández señaló que la violencia y la inseguridad son “herencia y heridas” provocadas por los gobiernos anteriores, por lo que la Cuarta Transformación atiende no sólo las consecuencias, sino también las causas; “el reto es consolidar a la Guardia Nacional como una fuerza sólida y permanente, de ahí que sea uno de los ejes centrales de la estrategia de seguridad pública”.

 

Enrique Vargas del Villar, del PAN, afirmó que su grupo parlamentario está a favor de las Fuerzas Armadas; sin embargo, consideró que la reforma no es la solución para la crisis de inseguridad, ya que no hay policías en más de 700 municipios. Propuso desarrollar otra estrategia, pues, advirtió, la Guardia Nacional y el Ejército no son “policías de barrio” y no pueden con la seguridad pública de fuero común.

 

Por el PRI, Karla Guadalupe Toledo Zamora indicó que su fracción parlamentaria votará en contra de la reforma, pues ésta “no construye seguridad, sino que consolida una dictadura que quiere imponer el gobierno e implementa un aparato de control político vertical y armado”; recordó que diversos organismos internacionales no han estado de acuerdo con el uso “indebido” del Ejército, ni en contar con una Guardia Nacional sin auditorias ni controles democráticos.

 

En su intervención, Luis Alfonso Silva Romo, del PVEM, explicó que estas reformas dotan de un marco jurídico sólido a la Guardia Nacional para que pueda combatir al crimen organizado, siempre bajo la guía y la conducción de la presidenta, de un mando civil.  Este proyecto va orientado a darle seguridad a las y los mexicanos, afirmó.

 

Del PT, Lizeth Sánchez García, insistió en que la propuesta consolida a la Guardia Nacional como una fuerza de seguridad pública profesional y permanente, conformada por personal militar con formación policial y civil especializado, bajo la rectoría de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Aclaró que el mando de la Guardia seguirá siendo civil y no se militarizará la seguridad pública, sino que la fortalecerá con profesionalismo, transparencia y con respeto irrestricto a los derechos humanos.

 

Por su parte, Clemente Castañeda Hoeflich, de MC, acusó que con esta reforma se renuncia al mando civil para encargarse de la construcción de la paz, se incrementan las acciones de discrecionalidad de la Guardia Nacional, y no se incorporan mecanismos de rendición de cuentas. Precisó que su bancada no está en contra de esa institución, sino de que el régimen “tergiverse su naturaleza y militarice la seguridad pública”.

 

Los senadores Enrique Vargas del Villar, del Partido Acción Nacional, y Néstor Camarillo Medina, del Partido Revolucionario Institucional, presentaron a la asamblea votos particulares respecto en contra del proyecto.