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/ Yamiri Rodríguez Madrid/
De unos meses para acá, las sentencias contra asesinos, secuestradores, pederastas y feminicidas se han endurecido, lo cual es digno de aplaudirse. Por ejemplo, la semana pasada, la Fiscalía General del Estado logró sentencia condenatoria de 120 años de prisión contra un secuestrador en Tuxpan.
Otro siglo fue en contra de cuatro secuestradores, que en 2020 mataron a su víctima en Perote y, posteriormente, cobraron rescate. También se sentenció a 50 años y 10 meses de prisión a otros dos secuestradores hace apenas unos días. Más ejemplos de estas sentencias fueron los 60 años de cárcel por desaparición cometida por particulares en el municipio de Tempoal.
Y como estos hay muchos otros ejemplos. Por un feminicidio en Playa Vicente, un sujeto purgará 50 años de cárcel. Pero más allá de los casos individuales, son las sanciones ejemplares que se intentan dar a quienes cometen delitos tan graves como estos. Llama la atención que muchos de los sentenciados son jóvenes, entre los 20 y 30 años de edad.
Es cierto que esto no devuelve a las víctimas con sus seres queridos, pero es una forma de hacerles justicia y, dos, hará que muchos otros malhechores lo piensen mejor antes de cometer sus fechorías. A nivel federal, el tope máximo de condena es de 60 años y recordemos también que, en 2005, se eliminó la pena de muerte del país, aunado a que el artículo 22 constitucional prohíbe “penas inusitadas y trascendentales”, como la perpetua, pues se considera que viola la dignidad humana. Como si los asesinos, secuestradores, feminicidas, pederastas y violadores pensaran en la dignidad humana de sus víctimas antes de atacarlas.
Pero el Artículo 163, del Código Penal veracruzano, establece que, si durante un secuestro se priva de la vida a la víctima, la pena va de 50 años a prisión vitalicia, además de una multa, sin posibilidad de beneficios penitenciarios. El siglo de condena dictado a los secuestradores de Perote es el primer castigo ejemplar en la historia penal de nuestro estado.
Ojalá, insisto, estas sentencias ejemplares, sirvan en la estrategia de reducir finalmente la incidencia delictiva en Veracruz.
@YamiriRodriguez
