- Dicha tarifa se aplica sólo para uso doméstico, así como para cargas de bajo consumo, señala el Senador.
- 01/10/2022/ Ciudad de México.- El senador Julen Rementería del Puerto promueve un punto de acuerdo para exhortar a los titulares del Ejecutivo federal y de la Comisión Federal de Electricidad, a fin de que suscriban con el Gobierno de Veracruz un acuerdo que permita la aplicación de la tarifa 1F en la entidad y se condonen los adeudos de las familias veracruzanas.Dicha tarifa, explicó el legislador de Acción Nacional, se aplica sólo para uso doméstico, en cargas de bajo consumo y que están conectadas individualmente a casas, departamentos, edificios o viviendas, en localidades cuya temperatura promedio mensual en verano sea de 30 grados centígrados, como mínimo.
Rementería del Puerto recordó que, el 1 de febrero de 2021, se suscribió un acuerdo entre la CFE y el gobierno de Tabasco, para cancelar un adeudo de 11 mil millones de pesos, que miles de usuarios tenían con la dependencia.
Por ello, dijo, solicitamos se otorgue el mismo trato para los usuarios de las entidades federativas con situaciones similares, pues Tabasco no es el único estado que presenta adeudos, ni problemas con el pago de la energía eléctrica, ni el único con altas temperaturas.
No es posible que Veracruz, que registra temperaturas arriba de los 30 grados, no cuente con esa tarifa especial, tenga precios elevados y no se le considere para un programa especial de condonación de adeudos y reclasificación de tarifas, en beneficio de los más necesitados y de los que menos tienen.
En el proyecto, que se turnó a la Comisión de Energía, Rementería del Puerto refirió que la Organización de las Naciones Unidas estableció, como uno de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, garantizar el acceso universal a la energía de forma asequible, fiable, sostenible y moderna para todos.
Sin embargo, añadió, la situación económica del país no se encuentra en su mejor momento, y a ello hay que sumarle que las reformas estructurales del titular del Ejecutivo no benefician la calidad de vida de los mexicanos, con lo que se observa una alza en los precios de la canasta básica, combustibles y en los servicios públicos, lo que incluye a la energía eléctrica.