*Justicia Para Mayoli” dice un papel rosa en un bote que recorre el Centro de Boca del Río.
/Ana Alicia Osorio/ Testigo Púrpura.com/
Boca del Río, Ver 15 agosto 2021.- Dos decenas de personas, amistades de Martha Yolanda Ramírez, se reúnen alrededor de él. Ninguna quisiera estar aquí. Ninguna quisiera llorarle a su amiga, pero tras su feminicidio es lo único que les queda.
Mayoli siempre les repetía a sus compañeras de trabajo, a sus amigas, que lo más importante para ella era su hija de 13 años, por eso ahora se quieren asegurar que nada le falte, para eso quieren el dinero que van reuniendo en el bote que cargan con pesar.
Ella, cuenta su amiga Fernanda, tenía 33 años y llevaba año y medio en Veracruz. Era originaria de Orizaba donde se quedó su mama y su hija mientras ella llegó a laborar en una tienda de conveniencia donde esperaba reunir el dinero para sacar su casa y hacerse de su propio patrimonio.
“Era una persona súper súper sonriente, muy colaborativa, muy protectora, muy cuidadosa de todos sus compañeros, muy consentidora la verdad, una chava súper aplicada acababa de tener una promoción hace dos meses, le quedaba un mes de su entrenamiento para concluir el siguiente paso de su promoción”, señaló.
“Sus planes eran esos, seguir trabajando para mejorar la calidad de vida de su familia, ella hablaba de comprar su casa, de los planes que tenía a futuro, de tener algo para su hija y su familia”, añadió.
Pero sus planes no se harán realidad. Su expareja le truncó todos sus sueños cuando la asesinó con un arma blanca.
“No siempre el agresor se muestra como un agresor, son cosas que nunca imaginamos”, lamentó su amiga.
También recuerda que Mayoli ya había notado que algo andaba mal, ya había terminado con él y ya había puesto límites para que mantuviera su distancia. Pero eso no fue suficiente.
“Se le llegó a comentar levanta un acta de hechos (…) puso sus límites, no fueron respetados, no fueron respetados, de verdad es de admirarse, puso sus límites pero no fueron respetados” contó.
Mujeres, hombres, amigas, desconocidas, llegan a la esquina donde Mayoli fue víctima de feminicidio y ponen unas flores. Rezan. Piden por su descanso.
En esa esquina las personas que vieron la agresión corrieron tras el feminicida y lo retuvieron hasta que llegó una patrulla, por eso actualmente se encuentra en prisión preventiva.
Desde esa esquina piden, de nuevo, apoyo para recaudar dinero para la familia de Mayoli, los gastos que tienen ahora y los que diariamente ella pagaba con el trabajo que ya no podrá hacer.
Si quieres apoyar está disponible el número de cuenta: 4152 3135 1287 1356