*Nació con una condición médica auditiva que no afecta su desempeño .
/ Por Horacio Alvarado / Foto: Club Universidad Nacional.
23.11.2024. Ciudad de México.-Las pulsaciones se aceleraban con la emoción y el nerviosismo. La concentración aumentaba con el silbatazo inicial y la satisfacción de cumplir un sueño al pisar el césped del Olímpico Universitario. Momentos inolvidables que vivió Tabatha Rivas, arquera de Pumas, quien debutó en la Liga MX a los 17 años de edad.
Ella nació con una condición médica auditiva, y desde los dos años de edad le colocaron un implante coclear, aparato que le permite escuchar con claridad y emprender su vida deportiva.
“No me ha afectado, quizá sólo un poco cuando tuve que acercarme con mis compañeras a decirles que tengo un implante. Me daba mucha pena, pero poco a poco conversé con ellas y con el cuerpo técnico. A veces cuando me hablan no sé si estoy escuchando. Las voy conociendo para decirles que tengo el implante”, compartió la canterana universitaria.
“Antes de ese primer partido, el entrenador me dijo que iba a jugar. Me pregunté si estaba nerviosa o si estaba lista, pero me dije: ‘¡Claro que estoy lista!’”.
Tales fueron las palabras de la joven guardameta, quien fue titular con el primer equipo femenil de Pumas en el último partido de la fase regular del Apertura 2024 ante Necaxa.
“Cada vez que iba a los partidos imaginaba que debutaría. He trabajado todos los días para estar dentro del campo. No me tocaba entrar, pero siempre lo imaginé para creer en mí. Confío mucho en mí y sabía que estaba lista para hacerlo”.
Ya había estado en el Olímpico Universitario. “Siempre había querido jugar aquí. Cuando salimos a cantar el himno me sentí muy feliz. Qué emoción saber que iba a jugar en el equipo titular. Estaba emocionada y un poquito nerviosa, pero a la vez impactada y lista para iniciar”.
El sueño de Tabatha siempre fue jugar al futbol. “Había una escuela de futbol a la que me inscribieron, entonces ahí empecé a jugar. Primero estuve como delantera, hasta que choqué con un niño y ya no quise seguir en esa posición porque era muy difícil para mí. Cuando me pusieron como portera me encantó”.
Su gran referente en el futbol es su ahora compañera de equipo Mélany Villeda, quien desde joven destacó en el arco de Pumas e incluso llegó a la selección mexicana. “Quise jugar como portera desde que vi a Mélany. Me dije que quería ser como ella porque me gustaba su estilo de juego. Desde chiquita me gustaba lanzarme, comunicar y hacer despejes como ella”, aseguró.
Pumas ha sido el club de su vida, y gracias a que la familia es fan del equipo eso la motivó a portar los colores de esta institución. “Mi pasión es ser canterana. Mi familia le va a Pumas, entonces me gusta mucho estar en este club. Está bonita la Cantera, me gusta el escudo y las playeras con las que juegan. Me siento muy feliz estar aquí en Pumas porque siempre he sido fan de este equipo”.
Rivas llegó al Club Universidad a los 13 años de edad para la recién creada categoría sub-17. A partir de entonces, ha tenido un proceso formativo como canterana. En este tiempo, fue parte del campeonato del equipo sub-18 en 2022, se ha afianzado como titular en el equipo sub-19 y entrena a diario con el primer equipo femenil, bajo las órdenes de Marcelo Frigério.
“Fui a las visorías en la filial en Pumas. Ahí es cuando me invitaron a entrenar con la categoría sub-17 en Cantera. Mi sueño siempre fue debutar en Pumas. Sí me ha costado mucho trabajo llegar hasta aquí, a la primera división. Mi sueño era debutar, entonces no me rendí. Llegué aquí a los 13 años y pese a todo trabajé en estos tres años para cumplir mi sueño”, mencionó.
El día de su debut fue especial, no sólo por jugar, sino también por el aprendizaje que significó tener la responsabilidad de ser la guardameta del cuadro universitario. “Mis familiares me felicitaron mucho, mis amigos también. Cometí un error, pero mi hermana me dijo que no pasaba nada, ya que los errores suceden, tiene toda la razón”.
Sus papás le dijeron que somos seres humanos y nos podemos equivocar. “También me dijeron lo orgullosos que están de mí. Yo me siento muy valiente y muy fuerte. Agradezco mucho a Marcelo Frigério, a mis otros entrenadores y a mis compañeras porque me ayudan a ser mejor. A veces las emociones me ganan, pero tengo apoyo de todos”, compartió.
Los siguientes objetivos de la guardameta son claros: una carrera en Pumas, en selección mexicana y tener la oportunidad de jugar en otro país. “Mi primer sueño ya lo cumplí, pero todavía falta. Quiero ser titular con el primer equipo y llegar a la selección mexicana. Después de eso quiero conocer Europa e ir a jugar a un equipo de allá… No se rindan, trabajen duro todos los días. Si quieren cumplir algún sueño no lo dejen”, sentenció.