* Un crimen que se se pudo haber evitado.
* Ángel Fuentes Olivares, “El Pato”, acusado de engañar y violar durante años a jóvenes deportistas, permanecia impune pese a denuncias.
/Redacción/.
Boca del Río, Ver. 09 junio 2020.- Cuando la justicia no llega la tragedia empieza a invadir el ánimo colectivo entre las víctimas. Este es uno de los casos emblemáticos de cuando la procuración de justicia y los instrumentos solapan, por omisión o colusión, a un depredador.
En 2019 Bernardo N”, un futbolista inició el calvario en su carrera profesional tras enfrentar abuso sexual de un “promotor deportivo” y fiscal, y por si fuera poco a su caso, autoridades y directiva le alentaron a seguir delinquiendo con el incentivo de la impunidad y el tráfico de influencias para evitar que el abusador fuera alcanzado por la justicia.
En el año 2018 fue denunciado por abuso sexual en contra de jugadores de fútbol sub 17, menores de edad, que aspiraban ingresar a las fuerzas básicas del Veracruz y de igual manera fue vinculado a proceso por la causa penal 40/2019 en marzo del año 2019.
El futbolista y los familiares del único chico que tuvo el valor de denunciar, acusan que la demanda fue congelada en el municipio de Boca del Río, en donde el presunto victimario, Ángel Fuentes Olivares, se desempeñaba como fiscal de distrito y nunca nadie en la Fiscalía hizo algo para detener el drama que se gestaba.
Los padres de “Bernardo N” solicitaron la intervención de la FMF, ante la impunidad y solo obtuvieron el veto de su hijo en otros clubes. La FMF se lavó las manos y se declaró incompetente porque “el caso se dirimía en instancias gubernamentales”.
La Asociación Mexicana de Futbolistas (AMFpro) le prometió apoyo, dejaron de contestarles las llamadas. El club Veracruz ventiló el nombre de la víctima y desde entonces el jugador, que antes había militado en 4 clubes, probó suerte en 3 equipos, donde lo rechazaron, reseñan los medios especializados en el deporte.
Fueron con el vocero del Presidente Andrés Manuel López Obrador, Jesús Ramírez Cuevas, y tampoco hubo respuesta, aun cuando crónicas aseguran se lo encargó al gobernador Cuitlahuac García. Le dijo a la prensa que la fiscalía investigaba, pero la justicia nunca llegó.
En diversas notas informativas se reseñó el caso de Bernardo N, victima del abuso sexual por parte de Ángel Fuentes Olivares, entonces Fiscal en Boca del Río, Veracruz, sin embargo, no hubo castigo para él, pues el juicio se fue alargando como conocida táctica de la impunidad que impera en Veracruz.
“La semana pasada, Fuentes Olivares fue asesinado, presuntamente por tres jóvenes jugadores de los que también habría abusado sexualmente y que se encuentran detenidos”.
Los presuntos homicidas son Martín “N”, Osiel “N” y Martín “N”, los tres de aproximadamente 18 años de edad, se presume que los jugadores convivieron con el ex fiscal de Boca del Río y lo apuñalaron en un domicilio.
Al ex fiscal, Ángel Fuentes Olivares, le quitaron la vida a puñaladas en la calle de Nogal esquina Juncos del fraccionamiento Floresta.
Ante el ejemplo que las autoridades dieron en el caso de Bernardo “N”, no es difícil imaginar que los tres chicos abusados por este “fiscal”, optaron por hacer justicia por propia mano ante tanta indefensión.
Las autoridades gubernamentales y ministeriales presumieron la “captura de los tres chicos” de apenas la mayoría de edad, detenidos por el asesinato del ex fiscal Ángel Fuentes Olivares.
Tres jóvenes que forman parte de las fuerzas básicas de fútbol, dos del Club Tiburones Rojos de Veracruz, y una del Club Necaxa, de acuerdo a fuentes de la Fiscalía General del Estado. Tres vidas truncas por la omisión de la justicia ante su calidad de víctimas.
Hoy la fiscalía los lleva a tribunales con todo el peso de la ley pero, de la sanción por la omisión de los responsables en ese poder por omitir el castigo por abuso sexual, quedará en el olvido.
Un crimen que se pudo haber evitado.