22.10.2025.- Washington, D.C. La política exterior de Estados Unidos volvió a sacudir el tablero geopolítico latinoamericano tras la presunta autorización del presidente Donald Trump para que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) lleve a cabo operaciones encubiertas en territorio venezolano.
La medida, que fue confirmada por fuentes del Pentágono y medios estadounidenses, ha generado una ola de reacciones diplomáticas, condenas internacionales y un nuevo capítulo en la ya compleja crisis venezolana.
Aunque los detalles de las operaciones permanecen clasificados, funcionarios cercanos al Consejo de Seguridad Nacional revelaron que las acciones incluyen “recolección de inteligencia estratégica, apoyo a actores opositores y neutralización de amenazas vinculadas al narcotráfico y redes ilícitas”.
La orden ejecutiva fue firmada por Trump bajo el argumento de “proteger los intereses democráticos en el hemisferio occidental”.
La decisión se enmarca en una creciente presión de Washington sobre el gobierno de Nicolás Maduro, a quien Trump ha calificado repetidamente como “dictador” y “enemigo de la libertad”.
Reacción de Nicolás Maduro: “Una agresión imperialista”
Desde Caracas, el presidente venezolano Nicolás Maduro condenó enérgicamente la medida, calificándola como “una agresión imperialista disfrazada de operaciones de inteligencia”. En cadena nacional, Maduro denunció que “Estados Unidos ha cruzado una línea roja al violar la soberanía de Venezuela” y pidió a la comunidad internacional “rechazar esta nueva forma de colonialismo encubierto”.
El mandatario también ordenó reforzar la seguridad en zonas fronterizas y activar protocolos de defensa interna ante “posibles infiltraciones”.
Críticas desde la ONU y organismos internacionales
Expertos en derecho internacional y representantes de la ONU expresaron preocupación por la legalidad de las operaciones. La relatora especial sobre soberanía estatal, Anaïs Lefevre, advirtió que “las acciones encubiertas sin consentimiento del Estado receptor constituyen una violación flagrante de la Carta de las Naciones Unidas”.
Organizaciones como Human Rights Watch y Amnistía Internacional también alertaron sobre el riesgo de escalada militar y el impacto en la población civil.
### 🇨🇴 Gustavo Petro: “Trump es el primer responsable de esta crisis”
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se sumó a las críticas y señaló directamente a Trump como “el primer responsable de la crisis venezolana”. En declaraciones desde Bogotá, Petro afirmó que “la intervención extranjera solo agrava el sufrimiento del pueblo venezolano” y reiteró que Colombia no apoyará ninguna acción militar en el país vecino.
Petro, quien ha promovido una política de diálogo regional, llamó a una cumbre urgente de países latinoamericanos para discutir el impacto de las operaciones estadounidenses y buscar una salida pacífica a la crisis.
La autorización de operaciones encubiertas ocurre en un momento de alta sensibilidad en América Latina. Venezuela enfrenta una profunda crisis económica, migratoria y política, mientras Estados Unidos refuerza su presencia en el Caribe y estrecha lazos con gobiernos aliados en la región.
Analistas advierten que esta decisión podría tener consecuencias impredecibles, desde un aumento en la polarización regional hasta posibles enfrentamientos indirectos entre fuerzas locales y agentes extranjeros.
La autorización de operaciones encubiertas por parte de la CIA en Venezuela marca un punto de inflexión en la política hemisférica. Más allá del debate legal y diplomático, el episodio refleja una creciente confrontación entre modelos de gobernanza, intereses estratégicos y visiones sobre la soberanía en América Latina. El papel de líderes como Trump, Maduro y Petro será clave en los próximos días para definir si esta crisis se encamina hacia el diálogo o hacia una nueva fase de conflicto.












