Trump amenaza con arancel de 5% a México por incumplir tratado de aguas.

08.12.2025 Washington, EUA.- Donald Trump lanzó una nueva advertencia contra México al amenazar con imponer un arancel adicional del cinco por ciento a las exportaciones mexicanas, acusando al país de incumplir el Tratado de Aguas de 1944. La declaración, realizada a través de su plataforma Truth Social, reaviva las tensiones bilaterales en un momento en que la relación comercial y política entre ambas naciones atraviesa un periodo de alta sensibilidad internamente aun cuando el trato a la Presidenta es de deferencia política.

El mandatario estadounidense sostuvo que México adeuda a Estados Unidos alrededor de 800 mil acres-pies de agua, equivalentes a más de 200 millones de metros cúbicos, que deberían haberse entregado en los últimos cinco años conforme al acuerdo firmado hace más de siete décadas.

Según Trump, esta falta de cumplimiento ha afectado gravemente a los agricultores y ganaderos de Texas, quienes enfrentan pérdidas en cultivos y dificultades para sostener su producción. En su mensaje, exigió que México libere al menos 200 mil acres-pies antes del 31 de diciembre, advirtiendo que de no hacerlo se aplicará de inmediato un arancel del cinco por ciento sobre los productos mexicanos que ingresen al mercado estadounidense.

El Tratado de Aguas de 1944 establece un esquema de distribución de caudales entre ambos países, principalmente en la cuenca del Río Bravo y el Río Colorado. México se comprometió a entregar un promedio de 350 mil acres-pies anuales a Estados Unidos, acumulados en ciclos de cinco años.

Aunque históricamente han existido tensiones por sequías y variaciones en el cumplimiento, la amenaza de sanciones comerciales introduce un nuevo elemento de presión que podría escalar hacia un conflicto diplomático mayor.

La advertencia de Trump ocurre en un contexto en el que el comercio bilateral representa uno de los pilares de la economía mexicana. Un arancel adicional del cinco por ciento tendría repercusiones inmediatas en sectores como el automotriz, el agroalimentario y el manufacturero, que dependen en gran medida del acceso al mercado estadounidense.

Analistas señalan que la medida podría generar incertidumbre en las cadenas de suministro y afectar la competitividad de México en un momento en que busca consolidar su papel como socio estratégico en Norteamérica.

El gobierno mexicano no ha emitido aún una respuesta oficial, aunque fuentes diplomáticas reconocen que el tema del agua ha sido motivo de negociación constante en las comisiones binacionales. Expertos en política exterior advierten que la amenaza de Trump podría utilizarse como herramienta de presión política interna, apelando al electorado agrícola de Texas y otros estados fronterizos.

Sin embargo, también subrayan que la imposición de aranceles podría violar compromisos adquiridos en el marco del T-MEC, lo que abriría la puerta a controversias legales y paneles de resolución de disputas.

La situación pone de relieve la fragilidad de los acuerdos internacionales cuando se cruzan con intereses políticos y económicos inmediatos. Mientras Trump insiste en que México “sigue violando nuestro tratado integral sobre el agua”, la discusión se desplaza del ámbito técnico de la gestión hídrica hacia un terreno de confrontación comercial y diplomática.

El desenlace dependerá de la capacidad de ambos gobiernos para encontrar una salida negociada que evite un nuevo choque arancelario y preserve la cooperación en materia de recursos compartidos.

Agencias