*Yo Campesino / De rodillas.
/*Miguel A. Rocha Valencia* /
El método es el mismo; desde el poder se utiliza la fuerza y el chantaje para someter; desde ahí mismo se califica a los demás y si no obedecen, se les amenaza o castiga. Desde ahí mismo se aplica la ley, se desconocen instituciones y se intenta destruir las que estorban.
Paralelismos entre las estrategia de Donald Trump a nivel universal que ya desconoció convenios internacionales, abandonó la Organización Mundial de la Salud, se pone por encima de la autoridad de la ONU o la OTAN, se lanza contra los débiles pero se mide o somete ante los fuertes con quienes hace alianzas seguramente para repartirse la geografía universal.
En México igual ocurre con las instituciones, se somete a los órganos electorales, se borran los estorbosos órganos autónomos y se destruye al poder Judicial en tanto se ofende en público a los críticos o a quienes piden trato justo o aplicación de la Ley, pero ante los poderosos, se ponen de rodillas y hacen ofrendas para calmarlos.
Se le lleva la 4T en paquete de 29 a delincuentes reclamados y no en Estados Unidos violando amparos y determinaciones judiciales, pero al igual que al presidente de Ucrania, Volodimir Oleksándrovich Zelenski, que fue a entregar sus recursos minerales a cambio de ayuda en su guerra contra Rusia, el mandamás universal los desprecia, les dice que es insuficiente, que se humillen y se pongan de rodillas.
Sólo así, de rodillas, humillados y sometidos, serán perdonados. De otra forma no recibirán el visto bueno de Donald Trump quien a bordo de su nave supremacista amenaza al mundo con el caos luego de que abierta alianza con el antes enemigo de Estados Unidos con quien seguramente ya sueña con repartirse el globo terráqueo con el reparto de tierras, soberanías y recursos naturales, especialmente hidrocarburos y metales industrializables.
Ya dijo Trump que él no es débil ni estúpido como califica a su antecesor quien dio un manejo político a su administración, apoyó a Ucrania y dialogó con el gobierno de la 4T.
Hoy se alza el presidente estadunidense como una auténtica amenaza contra el orden universal y con ello la seguridad especialmente con su alianza con Rusia, que no es gratuita, regaña y ofende públicamente a la víctima, al invadido y defiende al invasor.
Pero al igual que en México la 4T, el autoritarismo con que se desempeña tiene consecuencias y es punto de unidad entre naciones medianas que pueden convertirse en gigantes si encuentran un líder.
Ahí está la Unión Europea que nació precisamente como organismo de seguridad y de defensa contra posibles actitudes abusivas y ambiciosas de potencias como las mencionadas no sólo en materia bélica sino monetaria y comercial.
Con ellas hay capacidad de respuesta no sólo a favor de Ucrania y contra quien lo invadió, como ya lo hizo. Ahora sus posibilidades de pertenecer a la OTAN son mayores.
Zelenski fue a entregar los recursos de su país como forma de pago al apoyo de Estados Unidos que reclama más de 350 mil millones de dólares, pero aun así, fue agredido ante el mundo; no se dejó humillar y aunque prácticamente lo corrieron de la Casa Blanca, mantuvo la firmeza de sus convicciones y no aceptará que se ofende a través de él a su pueblo.
Hoy Ucrania se convirtió en el vértice de una nueva potencia donde países con recursos financieros y materiales están unidos y no dudemos que ante las imposiciones trumpistas en medio Oriente surja una nueva corriente en tanto que en México, lejos de reaccionar ante las agresiones estadunidenses por voz del departamento de Estado y de la misma Fiscal General Pamela Bundi, parece que se buscan nuevas ofrendas para colmar las exigencias del gobierno del güero.
No se trata de defender a los delincuentes mexicanos que frente a los estadunidenses son “hermanas de la caridad” pues aquellos manejan poco más de 100 mil millones de dólares en el sistema financiero de aquél país, generaron más de 20 mil asesinatos con al menos 35 masacres donde la policía no estuvo exenta pues mató a más de mil 300 personas en tiroteos.
Simplemente se trata de que con la amenaza de los aranceles, Donald Trump pretende someter a México donde ya de por sí no existe un poder judicial autónomo o sometido, para obligar al nuestro gobierno a cumplir sus deseos. Lo mismo con Canadá y otros países, pero sus intereses van más allá.
Por eso es que tras esas peticiones insatisfechas, está la amenaza latente de invadir bajo el pretexto de la inseguridad o el narcotráfico. Se trata de una ambición expansionista como lo muestra el hecho de denominar al Golfo de México como de América y con ello hacer uso de sus recursos de manera abierta como ya lo hacen con el petróleo submarino y transfronterizo.
Se trata de ponernos de rodillas y por qué no, el acuerdo con Rusia es retirar su apoyo a Ucrania para que sea colonizado y explotado y a cambio poder abusar de este lado del mundo como lo hace con Panamá desea hacerlo con México y el resto del continente.
El destino manifiesto del ahora sí, imperialismo.