Una burda campaña contra el INE. Salinas Pliego le hace el trabajo sucio a AMLO

Verónica Malo Guzmán.

You can count on me, and I can count on you
You show up, like I show up
And I’ll keep showing up for you
So take my hand, don’t be afraid
This too shall pass, this too shall pass
We’ll get through it all together
We’ll get through it all together
(Puedes contar conmigo y yo puedo contar contigo
Tú te haces presente, como yo me hago presente
Y seguiré estando ahí para ti
Así que toma mi mano, no tengas miedo
Esto también pasará, esto también pasará
Lo superaremos todo juntos
Lo superaremos todo juntos)
David Guetta y Sia

Primer acto: El descaro
Además de afirmarlo en redes sociales, Ricardo Salinas Pliego ha decidido ponerse a la altura del incondicional al régimen, John Ackerman, culpando de todos los males de nuestra democracia al Instituto Nacional Electoral.

La cabeza de TV Azteca, entre otras empresas, escribió ayer en El Universal un artículo de opinión en el que establece —más específicamente, hace un llamado público— que el INE debe desaparecer (y morir; para el caso, una cosa y la otra son lo mismo). Y lo hace sustentando “sus argumentos” en falsedades y abiertas subjetividades. Ataque burdo y terrible viniendo de una importante figura pública, además de empresarial, de México.

Pero ya que todo tiene una razón, se adivina la condonación de impuestos y las salvedades en el pago de adeudos fiscales para Grupo Salinas a cambio de hacer el trabajo sucio de López Obrador contra el INE.

Dicho por la misma Raquel Buenrostro, titular del SAT, Salinas Pliego, presidente de Grupo Salinas adeuda al Servicio de Administración Tributaria la friolera de ¡40 mil millones de pesos! Eso sin olvidar que la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa determinó que Elektra, cuyo dueño también es Salinas Pliego, debe 5 mil millones de pesos por no haber pagado por el ejercicio de 2011 el ISR (impuesto sobre la renta).

A lo anterior hay que recordar que Salinas Pliego forma parte del consejo empresarial asesor de AMLO, y es quien tuvo la exclusividad del manejo de todo el dinero que se ha repartido a través de los diferentes programas sociales y clientelares del gobierno federal durante los dos últimos años.

Tal vez, antes de acusar al INE, de oneroso e inservible, sería importante que el magnate pague sus impuestos y todo lo que debe a las arcas públicas (es decir, a todos los mexicanos) porque, de otra forma, solo se puede entender este ataque como una forma de esquivar las enormes deudas que tiene él y sus empresas ante el fisco.

Segundo acto: La memoria selectiva
Olvida también que el INE somos todos. Los que participamos votando y los que están a cargo de las casillas el día de la elección. De los miles de personas que acuden a invitar a otros ciudadanos a participar. Que, sin lugar a dudas, el Instituto Nacional Electoral, como un todo, sí representa LOS intereses de la sociedad (no en balde, de acuerdo a diversas recientes encuestas, el INE tiene incluso mayor aceptación social que el primer mandatario).

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Ricardo Salinas: El INE “debe morir” por hiperpolitizado, obsoleto, caro y arbitrario
¿Costoso? Blindar las elecciones de la desconfianza ciudadana y partidista es caro, y como sociedad nos llevó muchas décadas alcanzarlo. Ahora se olvida a conveniencia que esa enorme y compleja estructura surgió en gran parte en respuesta a los reclamos de los grupos políticos que hoy gobiernan el país y de los cuales Ricardo Salinas es hoy asesor.

El empresario, que ahora incursiona de lleno en la grilla política barata, pretende descalificar al INE con su baile de cifras. Pero convenientemente olvida mencionar que el presupuesto para este año para el Instituto es algo especial dada la envergadura de las elecciones que se llevarán a cabo en junio. Las más grandes en la historia del país.

Además, gran parte del presupuesto del Instituto Electoral que él menciona y que pretende equiparar a una estafa al pueblo mexicano es el que se les da a los partidos políticos; siendo que el que se lleva la mayor parte es Morena (2,195 millones de pesos).

Miente también al decir que el presupuesto es mayor a los 20 mil millones de pesos. No es mucha la diferencia, pero la cifra es menor: 19 mil 593 millones (poco menos de la mitad de lo que Salinas debe al fisco). Y lo dado a Morena es el 11% del presupuesto total del Instituto.

Cabría también preguntarse por qué, si en el 2018 la 4T señaló a Lorenzo Córdova y Ciro Murayama como “funcionarios ejemplares merecedores de todo nuestro respeto”, ahora pasan a ser denostados y hasta piensan que pueden llevarlos a su destitución.

La incongruencia continúa porque, el año pasado, que los consejeros del INE le negaron el registro a la agrupación política México Libre encabezada por Margarita Zavala y Felipe Calderón para convertirse en partido, se festejó la decisión.

En todo caso, si hay alguien que está imposibilitado de hablar sobre el financiamiento del INE y de los partidos políticos con base en “nuestros impuestos” es Salinas Pliego. Aplica la expresión: ¿nosotros/nuestros impuestos Kimosabi?

Tercer acto: La estafa
La otra acusación de Salinas Pliego, la relativa a los tiempos utilizados por el INE y por los partidos políticos, es algo que le pega en el bolsillo a Grupo Salinas. Debiera recordar, no obstante, que estos se administran conforme a lo que establece el Estado mexicano —no el INE— para los medios de comunicaciones (los cuales, por cierto, son concesiones también del propio Estado).

Algo sí es seguro, el crédito blando otorgado a Argos (entiéndase Carlos Slim, Televisa y Epigmenio Ibarra) y la posible condonación de los miles de millones a Salinas Pliego, los privilegios y el otorgamiento de concesiones son sin duda alguna, aliciente suficiente para atacar al INE y a cualquier ente, institución o persona que la 4T decida.

El dueño de Banco Azteca y Elektra pretende hacerle creer a la ciudadanía mexicana que lo que le conviene es sustituir a un árbitro electoral imparcial e independiente por una nueva estructura; que un puñado de rufianes —a nombre del pueblo— puedan convertirse —ellos sí— en censores para “callar a los ciudadanos, callar a los candidatos, callar al presidente y silenciar a los medios de comunicación” (mientras no sea TV Azteca, claro está), cuando estos lo decidan y a conveniencia. La respuesta de todos lo mexicanos a semejante propuesta debe ser un rotundo ¡NO!

Cuando lo superficial es lo popular. Felix, Salinas Pliego, Epigmenio, Samuel, AMLO
La burda campaña de Salinas Pliego para hacerle el trabajo sucio a Andrés Manuel contra el INE saldrá cara para el país. Algo así como la estafa que significa comprar a crédito los productos vendidos en Elektra; se termina pagando hasta cuatro o cinco veces su valor.

Salinas Pliego conoce su precio. ¿AMLO está dispuesto a pagarlo? Todo parece indicar que sí.