*Luis Donaldo Colosio, el hombre que pudo ser el presidente que México esperaba y que fue asesinado durante su campaña como candidato del PRI a la presidencia de México un 23 de marzo de 1994, aquí comparto mis experiencias con él…
Por Bárbara Obeso
A Colosio Murrieta lo conocí cuando recién llegó a Sinaloa como Delegado del CEN de la CNOP entre 1987 y 1988, era un hombre joven, bonachón, simpático, elocuente y muy atractivo, que acostumbraba a vestir con pantalón de mezclilla, botas vaqueras y camisa a cuadros.
En esa época no lo querían para nada los políticos que controlaban el poder en Sinaloa, comenzando por el gobernador en turno, le hacían “el feo” porque lo consideraban “un ranchero medio naco” por su estilo franco, directo y sin tapujos, le criticaban hasta su forma de vestir pues Luis Donaldo no usaba la típica guayabera y pantalon formal, ni saco, mucho menos traje, es decir: el outfit que todo político “decente” debía usar como lo dictaba el presidente en turno.
En ese tiempo yo era reportera y don Roy Campos Paterson gerente de la XENZ me había dado mi primera oportunidad como reportera y conductora titular del noticiario radiofónico “En Resumen” era una estación de radio en Culiacán muy escuchada y mi amigo y maestro el periodista Leonel Solís era el jefe de prensa de la CNOP y me pidió en varias ocasiones recibir en cabina y entrevistar a Luis Donaldo Colosio, Leonel se quejaba un poco sobre el trato desdeñoso que le daban otros colegas reporteros y columnistas al joven político sonorense por su forma de hablar directo, manejaba un discurso con sentido humanista y tendía a ser medio izquierdozo, sin poses, de frente, por su vestimenta fuera de los cánones acostumbrados por la clase política, a Colosio no lo consideraban un político “decente y serio” pues no vestía ni se comportaba como el resto de los políticos y ni siquiera era el delegado principal en el Comité Directivo Estatal del PRI en Sinaloa, era segundón pues y nadie lo entrevistaba ni le daban importancia.
Sin embargo, yo no tuve ningún problema y lo entrevisté tantas veces me lo solicitó Leonel Solís Reatiga y en otras ocasiones lo busqué para pedirle alguna declaración sobre temas políticos.
Era un hombre muy preparado y aunque se resistía a dejar su estilo norteño, cuando debía usar traje o guayabera lo hacía y también se veía muy bien y sin ningún tapujo se lo manifesté en corto, aunque me confesó en más de una ocasión, que no se sentía a gusto vistiendo formal.
Poco tiempo después su encomienda como Delegado del Sector Popular del PRI en Sinaloa terminó y fue llamado a otras labores partidistas.
No volví a saber de él hasta que un año antes de terminar el sexenio de Salinas se dio el destape de Luis Donaldo Colosio como el candidato del tricolor a la Presidencia de la República, lo cual me sorprendió pero también me dio mucho gusto.
Como reportera me tocó cubrir el martes 22 de marzo el acto masivo del inicio de su campaña en Culiacán en el Teatro Helénico del Parque Culiacán 87, en la tarde-noche seguimos cubriendo el resto de sus actividades en el Hotel Executivo donde tuve la oportunidad de solicitarle una pequeña entrevista a lo que accedió muy amablemente e increíblemente me recordó y agradeció las veces que lo recibí en cabina y después de abrazarme, darme un beso en la mejilla, le di las gracias por la entrevista, se despidió y subió a su habitación a descansar pues al día siguiente tenía que levantarse muy temprano a correr antes de partir rumbo a La Paz.
Muy tempranito el miércoles 23 de marzo lo llevaron a correr por el sendero del recién inaugurado nuevo malecón en el Desarrollo Urbano 3 Rios (existe por ahí una foto que le tomo a Luis Donaldo en ropa deportiva y corriendo con otras personas, Rogelio Cánto el famoso “Charrito”)
Después de correr el candidato regresó a su hotel, la comitiva se dirigió al aeropuerto donde Colosio tomo un avión rumbo a La Paz para continuar con la gira en su campaña política del PRI en busca del voto de los mexicanos para ser el presidente de México, sucesor de Carlos Salinas de Gortari.
Desde La Paz ese miércoles la comitiva priista voló a Tijuana a proseguir la gira del candidato y
lo demás es historia…
Creo que en todo el país vivimos un gran impacto emocional, en lo personal, era un miércoles 23 de marzo por la tarde, estaba en mi departamento con la TV encendida haciendo labores domésticas cuando escuché la noticia del atentado en Lomas Taurinas en Tijuana, corrí a la sala y con horror veía las imágenes y escuchaba la terrible noticia y no lo podía creer, en mi mente resonaba la melodía que tocaba el sonido cuando termino el mitin del tricolor, “La culebra” misma que no volvió a ser tocada durante mucho tiempo en ningún mitin priista.
Cuando escuché a Talina Fernández dar la confirmación de la muerte de Colosio confieso que lloré durante mucho rato, hasta que me quede dormida en la madrugada, fue desolador para mí y estoy segura que para miles de mexicanos, que al día siguiente despertamos con una sensación de desazón, dolor e incertidumbre y no porque hubieran asesinado a un candidato del PRI, fue más bien por no saber que iba a pasar en México y estoy segura que miles se sintieron como yo, huérfanos de patria, sin saber que rumbo tendría nuestro país…
Y miro ahora 25 años después y me sigo sintiendo igual…
La foto me la tomó y regaló don Octavio Márquez EPD fotógrafo de el periódico “El Sol de Sinaloa” y la he guardado como un valioso tesoro de mi época de reportera de radio y por estar junto a Colosio un gran personaje en la historia política de México, unos momentos en la última noche de su vida…
