Vamos bien, viene lo mejor…

**La política en rosa .

/ Elsbeth Lenz /

De pronto me ocurre, que cuando leo al maravilloso Manuel Rosete y sus recuerdos del pasado, me viene una envidia, que en ningún caso podría llamarse de la buena, porque eso no existe, pero si quisiera escribir algún día con ese respeto y esa admiración con las que de pronto don Manuel, se refiere a algunos políticos de antaño.

En Xalapa al menos y para donde uno voltee, hay publicidad de Claudia, de Adán, de Marcelo, de Sergio y de Eric Cisneros, luego de los autobuses, os espectaculares y las bardas, vendrán las promesas de campaña, esas que hemos oido en Veracruz tantas veces y que nada más no acaban de llegar.

De tanta desilusión la verdad que a mi si me gustaría algún día, recordar el pasado político de mi terruño y tener memorias de bonanza, de obras y acciones de gobierno, de buenas administraciones, de compromiso y seriedad, lamentablemente en mi memoria, la más añeja gestión gubernamental que tengo, es la de Miguel Alemán, que si bien es verdad que con él, casi todo funcionaba, el recuerdo del boquete financiero aquel, que dejó en la Secretaría de Finanzas y Planeación, no me deja recordarlo en su esplendor, pero en materia de desarrollo económico turismo e infraestructura, la cosa según recuerdo, no estuvo tan mal.

Ya luego y con más conciencia viene a mi mente, la administración de Fidel Herrera Beltrán, que si bien no fue caótica, si fue en exceso desordenada, Herrera Beltrán, siempre tuvo la SEFIPLAN metida en la cartera y desde un inicio él mismo manejaba los tractores en la SEDARPA, el Dragón Rojo en la SECOM y no fue el mismísimo Rey del Carnaval, porque de plano no se le ocurrió, pero ciertamente que el de Nopaltepec, tuvo un ejercicio gubernamental único, su cercanía con la gente, su carácter bullanguero y jocoso, lo dejó en la mente de muchos como un buen gobernador, siempre me dio la impresión de que Tío Fide, se chingó a la mitad de Veracruz, pero a la otra mitad la ayudo, por ello es que encontró un balance y aunque muchos lo odian, siempre hay alguien que lo defiende ¡Siempre!.

Javier Duarte de Ochoa, unificó la opinión de los veracruzanos, casi todos lo desprecian, a él no hay quien lo defienda ¡Vaya! Ni su propia familia; sin duda, Duarte de Ochoa tuvo la peor administración, que hasta ahora hemos conocido en Veracruz, en aquel entonces en las oficinas de gobierno, no había ni hojas de papel, ni tinta para impresoras y hubo muchísimos empleados de gobierno, a los que no le pagaban sus salarios mes con mes, ya de los jubilados mejor ni hablamos y es que el saqueo en aquel entonces fue tan evidente para toda la burocracia, que en sus propias narices, empezaron a llevarse, hasta las sillas de las oficinas de gobierno.

En entre diciembre de 2010 y octubre de 2016 Duarte su pandilla, desmantelaron el estado, la violencia vivió su peor momento, había cerros de muertos y desaparecidos; el saqueo fue tal, que no circulaba dinero en ningún lado, pararon la economía estatal, todos los contratos de infraestructura, suministros, servicios, etc, eran otorgados a un pequeño grupo de empresarios, amigos de la familia política de Duarte de Ochoa, los Macías, los Tubilla y toda esa recua, conocieron la abundancia, como nunca lo imaginaron, justo como tanto predicó su gurú, doña Karimita.

Cuando Javier Duarte huyó de la garra de la ley, los veracruzanos volvieron a respirar, pero el cerebro no llegó a oxigenarse lo suficiente, puesto que a la postre, se volcaron a las urnas y votaron por Miguel Ángel Yunes Linares ¡Hágame usted el favor! Ese hombre llegó con machete en mano y corrió a toda la burocracia de años, para colocar a su gente y desde ahí armar la estructura, que haría llegar a la silla de palacio de gobierno a su hijo Miguelito.

Yunes Linares, no tuvo tiempo de casi nada, solo pudo vaciar las oficina de gobierno y rellenarlas con el grupo de panistas y afines a su hijo Miguel, que llegaron de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, con decirles que hasta se trajeron un food truck del café de la Parroquia, mismo que estacionaron a mitad del cerro de la Galaxia, para que Moreno Chazarini y sus muchachos, no extrañaran el lechero de Ángel Fernandez.

La administración de Yunes Linares, estuvo mas que otra cosa marcada por el despido masivo de burócratas y la candidatura del hijo, cosa que para nada saldría bien, ya que al final ni disfrutó la silla y encima tuvo que entregársela a Cuitláhuac García Jiménez.

La administración actual, no podemos de momento saber ,si ha sido buena o mala, lo sabremos a la distancia, la doctora Martínez Olvera dice que García Jiménez, ha sido el mejor Gobernador, que ha tenido Veracruz, pero esa es solo la percepción de una funcionaria cercana al poder, habrá que esperar a que esto termine y tiempo después, el día que volvamos a ver a García Jiménez, caminar por Xalapa gozando del cariño y aprobación del ciudadano de a pie, ese que se queda aquí, lo sabremos, hasta hoy yo nunca he vuelto a ver a ningún ex gobernador caminando, por Xalapa en día laboral.

Ojalá y la suerte nos cambie, por lo menos en Veracruz, ojalá que el ciudadano participe y ahora que tendremos tantísimo tiempo para elegir, no solo a nuestros gobernantes, sino que podremos elegir incluso a los candidatos, votemos con el cerebro y no con el estómago o al menos que exista mayor participación ciudadana, porque si votamos nos involucramos.

En fin ¡Mi gente! Que tanto jelengue, con tanta corcholata defensora cuatrotera y tanto frente amplio por México, que una se pone a filosofar y piensa: tanta pinche campaña, pa’ que venga uno a terminar con los mismos, nos leemos mañana.

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