Por Yamiri Rodríguez Madrid
Aunque muchos veracruzanos festinen que la entidad ya está en semáforo naranja, no debemos pasar por alto que la emergencia por el Covid19 no ha terminado.
El que el semáforo epidemiológico haya bajado de tono, es para poder iniciar la reactivación de la vapuleada economía estatal, no nuestra vida social. Sin embargo, y desafortunadamente, la mayoría entendió otra cosa y ha bajado la guardia: se olvidaron ya del cubreboca, del gel desinfectante, de la sana distancia y salieron a festejar desde el pasado fin de semana.
Es cierto que el número de casos positivos y de muertos se ha desacelerado, pero las autoridades sanitarias han sido insistentes en que debemos ser cautos, dado que el otoño recién inició y, con éste, las enfermedades propias de la temporada, entre estas la influenza que también cobra vidas.
El semáforo naranja está más cerca del rojo que del verde, por eso no debemos cantar aún victoria. No todo es responsabilidad de las autoridades. Ellos no van a ir individuo por individuo poniendo cubreboca; es imposible mandar a un policía a cada hogar para pedirle a la gente que no hay que andar en la calle sin motivo alguno. A los comercios les urgía el oxígeno, la reapertura, pero deben cumplir con todos y cada uno de los protocolos para evitar regresar a los números del mes pasado.
Sabemos que el tema económico y el Covid19 serán inamovibles en la agenda electoral del 2021; lo vimos la noche de este martes en el debate presidencial más visto de la historia, el de los Estados Unidos, en donde la oposición tildó de responsable de cada una de las muertes al Presidente y este se defendió repartiendo culpas a China. John Biden, el ex vicepresidente, no dejó pasar la oportunidad para resaltar el creciente desempleo, la evasión fiscal de Donald Trump.
De ahí que muchos se pregunten si en realidad era el momento de cambiar a semáforo naranja o fue una estrategia para reducir los costos en las facturas electorales. Ya tendremos en unos meses más nuestras propias versiones tropicalizadas, en las que cada partido se dará vuelo en las acusaciones y veremos a algunos enjabonados intentando que se resbalen las culpas. Ojalá y para entonces hayamos ya pasado la emergencia sanitaria y económica.
@YamiriRodriguez