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/ Yamiri Rodríguez Madrid /
En medio de la tensión postelectoral que se respira en algunos municipios de Veracruz, el Consejo General del OPLE ha hecho un llamado a la civilidad y la madurez política. A lo largo de su sesión permanente de vigilancia de los cómputos municipales, el mensaje fue claro y contundente: la democracia se construye con votos, no con violencia.
La presidenta del organismo, Marisol Alicia Delgadillo Morales, fue enfática al recordar que los hechos como la pérdida de paquetes electorales en municipios como Tuxtilla, Hidalgotitlán o Mecatlán ya están siendo denunciados, pero subrayó que no se puede construir comunidad si se rompe el orden institucional.
Y es que, más allá del resultado de una elección, lo que está en juego es la estabilidad democrática de una entidad profundamente plural. La legalidad debe ser la vía para canalizar cualquier inconformidad, como lo señaló la consejera María Fernanda Sánchez Rubio: los medios de impugnación existen precisamente para resolver controversias en el marco de la ley. La violencia, como advirtió el consejero Quintín Antar Dovarganes, no solo es inaceptable, es inútil. Quemar paquetes electorales no les va a servir de nada.
El llamado se extiende también a los operadores políticos, muchas veces invisibles pero poderosos. La responsabilidad no recae únicamente en los candidatos o sus partidos, sino en todos aquellos que influyen desde las sombras. La ciudadanía observa, y Veracruz no necesita estrategas de la confrontación, sino líderes del consenso.
El mensaje de los consejeros es una invitación urgente a recordar que quienes cuentan los votos no son enemigos, sino nuestros propios vecinos. Funcionarios que, al terminar su labor, seguirán compartiendo banquetas, escuelas y mercados con quienes hoy los acusan injustamente.
La democracia veracruzana no se defiende con gritos ni con incendios. Se defiende con participación, respeto a las instituciones y, sobre todo, con la madurez de entender que la alternancia y la pluralidad no son amenazas, sino fortalezas.
Queda todavía camino por recorrer: los cómputos municipales tienen como fecha límite el 8 de junio. Será una semana tensa, pero también puede ser una semana ejemplar si todos asumimos con responsabilidad nuestro rol en este proceso. Porque si algo merece Veracruz en este momento no es más ruido, sino más altura.
@YamiriRodriguez
