*
/ Yamiri Rodríguez Madrid /
Mientras en Veracruz discutimos cómo frenar los constantes crímenes contra perros y gatos, en otras entidades del país avanzan en el reconocimiento de sus derechos. Por ejemplo, en la capital del país, se ha creado el Registro Único De Animales De Compañía (RUAC), el cual es un sistema de registro de animales de compañía creado por la Agencia de Atención Animal de la Ciudad de México, y tiene como objetivo promover la tenencia responsable de animales de compañía y protegerlos del maltrato y el abandono.
En el municipio de Querétaro, con el pago puntual del Impuesto Predial, el contribuyente tiene acceso a una póliza de seguro que cubre también gastos médicos por accidente de la mascota hasta por 3,500.00; gastos médicos finales, previos a su muerte, hasta por 3,500.00; gastos por eutanasia de hasta por 3,500.00; gastos funerarios de hasta por 3,500.00 y daños que cause la mascota a terceros, en su persona o propiedades, hasta por 15 mil.
En San Juan del Río, también en Querétaro, se han instalado bebederos en lugares públicos, mismos que cuentan con una adaptación para los animales de compañía. Es decir, toda una serie de acciones incluyentes que, sin duda, son bien aplaudidas en la sociedad.
Pero, ¿qué se hace en Veracruz? De los 212 municipios, muy pocos tienen centros de bienestar animal, en donde se pueda llevar a mascotas a esterilizaciones a precios más razonables o a que reciban atención veterinaria. Tampoco hay centros municipales de resguardo de perritos y gatos de la calle; toda esa carga la llevan las organizaciones de la sociedad civil que hacen malabares para poder promover la tenencia responsable.
Por eso, ojalá y que las y los próximos presidentes municipales tengan dentro de su agenda el bienestar animal, promoviendo servicios municipales de cuidado y asistencia y, en los que se pueda, hasta una clínica pública. A las y los diputados locales les toca también hacer su parte, endureciendo penas para los que lastiman y matan animales con toda la saña.
@YamiriRodriguez