Por Yamiri Rodríguez Madrid
Hoy, los problemas que enfrenta la capital veracruzana son mucho más complicados que los de hace una década: hay mayor inseguridad, menos empleo y menos obras. Hace diez años, gobernaba Xalapa David Velazco Chedraui y fue cuando se hizo el mayor programa integral de saneamiento que se ha hecho en el municipio.
Luego de un litigio que inició en la administración de Reynaldo Escobar Pérez, pasó por Ricardo Ahued Bardahuill, quien logró negociar el monto del adeudo, le tocó a Velazco Chedraui que se resolviera el conflicto y tener que pagar algo así como 400 millones de pesos. Aún con tal reto, se logró construir una planta de tratamiento detrás de la Central de Abastos de la ciudad, la cual hoy sigue operando al cien, a pesar del crecimiento poblacional y de que ahí, sorprendidos los vecinos, dicen llegan a los filtros plumas de pollos y preservativos, además de una red de tragatormentas y drenajes.
Junto con dicho programa, en esos tres años de administración se construyó el Puente de Pípila con recursos municipales, el Bicentenario con inversión bipartita, los cinco circuitos intercolonias, uno de estos de un kilómetro en Casablanca, además de que terminó la Central de Abastos y se intentó poner en marcha los ejes viales para desahogar el caótico tráfico xalapeño.
Hoy, desafortunadamente, no vemos obras icónicas en la capital del estado; por el contrario, hay una molestia creciente por el estado de las calles, llenos de baches, y por el subejercicio.
Aunque aún faltan varios meses para que inicie el proceso electoral 2020-2021, en el que se renovará aquí en Veracruz las 212 presidencias municipales y las 30 diputaciones federales y 50 locales, David Velasco es para muchos una opción en la próxima contienda, sobre todo cuando sacó más de 80 mil votos, sobre los 41 mil que tuvo en ese entonces Cinthya Lobato, con el membrete del PAN. Ya se verá.
@YamiriRodriguez