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18.12.2025. Tegucigalpa, Honduras.- La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, anunció que respetará los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral y ordenó el inicio de una transición pacífica, comprometiéndose a entregar el poder el próximo 27 de enero.
En un giro significativo de su discurso político, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, declaró públicamente que reconocerá al ganador de las elecciones generales celebradas el pasado 30 de noviembre, siempre que sea oficializado por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Durante una ceremonia militar en la capital, la mandataria instruyó a su gabinete a preparar el proceso de transición y aseguró que el traspaso de mando se realizará de manera pacífica el 27 de enero, fecha en que concluye su mandato constitucional.
Castro subrayó que, pese a las tensiones derivadas del escrutinio de las más de 19 mil actas presidenciales, ha decidido acatar la declaratoria del CNE como única autoridad competente para proclamar al próximo presidente.
“Aun en estas difíciles circunstancias, he sido respetuosa de la ley y de la Constitución de la República. Para mantener la paz en nuestro país, respetaré al ganador que proclame el Consejo Nacional Electoral”, expresó la mandataria.
El viraje discursivo ocurre en un contexto marcado por reclamos de recuento total de votos por parte de candidatos opositores, entre ellos Salvador Nasralla, del Partido Liberal, y Rixi Moncada, del oficialista Libertad y Refundación (Libre), quienes cuestionaron la decisión de los partidos tradicionales de abandonar la tesis del “voto por voto”
Ante esa situación, Castro optó por respaldar la institucionalidad del CNE y evitar un escenario de confrontación política.
La presidenta también destacó que la transición pacífica será acompañada por las Fuerzas Armadas, que garantizarán la seguridad durante el proceso.
En su mensaje, insistió en que la estabilidad democrática depende de respetar las reglas del juego electoral y de aceptar los resultados, aun cuando estos no favorezcan al partido en el poder. “El 27 de enero concluirá pacíficamente mi mandato”, afirmó.
El anuncio ha sido interpretado como un gesto de responsabilidad institucional y un intento de preservar la gobernabilidad en un país históricamente marcado por crisis postelectorales.
Analistas señalan que la decisión de Castro busca enviar un mensaje de confianza a la comunidad internacional y a los ciudadanos hondureños, en momentos en que la polarización política amenaza con profundizarse.
La transición que se inicia abre paso a un nuevo ciclo político en Honduras, con la expectativa de que el próximo gobierno asuma en un ambiente de paz y respeto a la voluntad popular.
El CNE continúa con los procedimientos de escrutinio especial y se espera que en los próximos días emita la declaratoria oficial que definirá al nuevo presidente de la República.
Agencias












