Y el Peje va…

**De memoria.

/Carlos Ferreyra/

Repito el título y tomo párrafos del comentario pergeñado y publicado hace poco más de un año: insistiré en la intención de López de concretar el Movimiento Obradorista, una ridícula copia del Movimiento Peronista o Justicialista de Argentina.

Las bases están dadas. La progresiva repetición de agrupaciones en torno a un núcleo cuasi sagrado y que casualmente se llama Presidencia del partido, y la suma, mezcla o revoltura donde explotadores permiten la convivencia con explotados a quienes hacen creer que son iguales.

Democracia igualitaria, tu voto vale lo mismo que el mío, vota por mi y desde las alturas velaré por tí; es la premisa sintetizadora de la ideología tricolor, hoy asumida por los morenistas o fieles de la Iglesia Pejiana.

Vale recordar que también en copia de las locuras conosureñas, hubo un fermento eclesiástico en pro de elevar a los altares al pastor evangélico llamado Andrés Manuel López Obrador, tal cual sucedió en ese chistoso país en donde crearon la Santa Iglesia Maradoniana.

En nuestras aras tiene mayor aliento Malverde, Santo Patrón de los Carteles.

Los gestos de la Virgen de los Descamisados, Eva Perón, su peinado con chongo en la nuca, la mano extendida hacia la masa, han desaparecido de nuestro panorama por presuntas o reales tormentas en las alturas.

Pero Evita era la titiritera, el monito era el general que desaparece de la vida pública con la desaparición de su compañera, y resurge de la mano de una señora de alias Isabelita, que conoció en un bar donde ella trabajaba. Aparece bajo el amparo de un tipo conocido como El Brujo López Rega.

Como sea, los cimientos estaban firmes a grado tal, que los mas radicales peronistas a su regreso a Argentina, eran ejércitos de jóvenes que ni siquiera habían nacido cuando gobernó el general.

En México se manifiesta un fenómeno similar. Los jóvenes nacieron con un país ciertamente ordenado, con instituciones que costaron sangre y fuego, pero que permitieron garantizar la estabilidad política y económica.

No era lo ideal, pero era lo que teníamos y conocíamos. Hoy, nunca en base a datos duros sino a discursos falaces, mentirosos y repletos de adoración al líder que, a su vez, se encuentra perdido por los renglones torcidos de la mente, perdemos todo incluyendo espíritu patriotero.

Decíamos en nuestro comentario original, que cada día nos convencemos mas de la existencia de zombies. Y de que tienen origen y destino en México. Un señor insulta, se burla, miente, roba o dicho más apropiadamente, dispone del Erario a su desleal entender. Oculta la información 25, 50 años y espera que nadie, en esta tumba nada clandestina que es el país, le reclame.

No hay duda, lo qué hay es pánico ante las reacciones del presidente López. El temerario gobernador de Jalisco, tan charro, tan valiente, finalmente se arrugó. Vistas las órdenes ante casos como David Páramo, auditor superior, bajo investigación por concluir que el aeropuerto texcocano cancelado, de deuda privada pasó a pública y hoy debemos liquidar en algo más de veinte años.

En la estructura financiera original, las instalaciones y sus usuarios, aerolíneas y pasajeros, pagarían lo que heredamos a nuestros nietos. El jalisquillo rajón tiene todos los motivos para ser precavido.

Pero todavía falta la integración del Movimiento Obradorista para la reelección cuya intención anunció en un discurso pronunciado la semana de nuestro escrito. No hay quien lo controvierta y mucho menos quien le haga saber que para registrarse como el más grande mandatario de nuestra historia, debe asumir, con grandeza, su retiro.

Lamentable, pero debemos admitir que ya no hay oposición. Los partidos políticos que de hecho nunca representaron nada, sino a ellos mismos y sus cúpulas dirigentes, debaten forma y fondo para no perder vigencia.

Los votantes pasaron al mundo de la ilusión y por eso ahora con tono pedigüeño imploran a seres incapacitados mentalmente pero dóciles para la tarea de levantadedos.

Deportistas, buen ejemplar la Guevara con mil millones extraviados, y faranduleros drogadictos, la Jesusa por muestra, pero conocidos por el público amorfo que integra la masa votante.

Cuatro años de caos y saqueos no lograrán despertar a una oposición que sólo busca migajas y croquetas. Sin programas ni propuestas, limitan su acción a una tibia crítica que no alcanza la virulencia de una ciudadanía cada día más furiosa por impotente.

Tendremos Peje López para rato…