Por Yamiri Rodríguez Madrid
Hace unos días, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, anunció que en vacunación contra COVID-19, se dará prioridad a municipios con mayor índice de pobreza y marginación. En un encuentro con gobernadores, en el que estuvo el veracruzano Cuitláhuac García Jiménez, el secretario de Salud, Jorge Alcocer expuso que es urgente abrir la distribución a todos los países, pues solo una de cada cuatro personas en el ámbito internacional tiene acceso y que, para la población de menos de 45 años, es recomendable usar biológicos de CanSino, Sinovac y Janssen.
La presidenta de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), la sonorense Claudia Pavlovich Arellano, planteó una estrategia de compras complementarias en la que los estados puedan apoyar en la vacunación de personas adultas mayores y ampliarla a todo el personal de salud, no solo a los que se encuentran en la primera línea, sino a la totalidad que se ubican en una atmósfera de riesgo en hospitales, y que se incluya a personal de seguridad y de procuración de justicia, que tienen alto contacto ciudadano permanente.
Esto trae a colación la queja del empresario veracruzano, Alejandro Cossío Hernández, en el sentido de que el gobierno federal lo está bloqueando y difamando, al negar que adquirió 2.5 millones de vacunas de Sputnik V.
De cumplirse lo dicho por la Federación, Veracruz tendría que estar en los primeros lugares de la lista debido al nivel de pobreza que enfrentan la gran mayoría de sus 212 municipios veracruzanos, pero ¿es correcto el enfoque planteado?
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud en la entidad veracruzana, municipios como Los Reyes, en la Sierra de Zongolica, tiene a casi un año del inicio de la pandemia, 2 casos sospechosos; Xoxocotla tiene uno. Aquila, Magdalena, Mixtla de Altamirano, 2 casos confirmados cada uno. El Puerto de Veracruz, donde se han perdido tantos y tantos empleos lleva más de 11 mil casos confirmados, Xalapa más de 4 mil, Poza Rica y Coatzacoalcos, más de 3 mil cada uno.
De ahí la pregunta si la prioridad es vacunar a los más pobres, o iniciar por donde está el corazón de la economía, aunque al paso que vamos, la clase media que es la fuerza laboral ya está en peligro de extinción. Estrategia y no ocurrencias es lo que hoy se necesita con urgencia.
@YamiriRodriguez
