Ciudadanos sin partido…

Sin tacto.

 / Por Sergio González Levet /

…y partidos sin ciudadanos.

Tal parece el futuro mediato de la democracia mexicana (o a la mexicana).

A regañadientes, los partidos nacionales han tenido que abrir espacio a las manifestaciones ciudadanas y convinieron en aceptar las candidaturas de personas del pueblo que no fueran avaladas por algún instituto político.

Cierto, les pusieron todos los obstáculos imaginables y todas las trabas posibles en la ley, pero no pudieron detener el torrente de la voluntad popular.

Las candidaturas independientes nacieron con fórceps pero alentaron vida y han ido creciendo con buena salud cívica.

Lo mejor de todo es que se avizora que los electores los van tomando en cuenta cada vez más y ya se han dado triunfos sonados, como el del Bronco, Jaime Rodríguez Calderón, en la gubernatura de Nuevo León y el del joven Pedro Kumamoto en Jalisco.

Lo cierto es que el pueblo bueno y honrado se está hartando de los excesos de los partidos políticos, o más bien de los grupos que se han adueñado de los comités ejecutivos nacionales y de los directivos estatales, y con ellos de los votos que les dan puestos y de las jugosas prerrogativas que sus diputados les conceden, a cuenta del erario público, ése que sufragamos todos nosotros y que ellos disfrutan.

A medida que avancen los años, las elecciones y las pillerías de quienes detentan el poder en los partidos, la conciencia nacional irá tomando forma para empoderar a candidatos surgidos de entre la gente común y corriente, es decir, las personas que son verdaderamente excepcionales y finas.

En Veracruz está emergiendo un movimiento ciudadano, alejado conscientemente de los partidos, del Gobierno y de las autoridades electorales.

Juan Carlos Mezhua -el aún alcalde de Zongolica-, Uriel Flores Aguayo, Tomás Mundo y muchos liderazgos regionales de buen calibre aparecen en este proyecto que, por principio de cuentas, amenaza con dejar sin militantes al exiguo PRD jarocho, que se reduce y reduce, no obstante la buena labor de su dirigente Sergio Cadena.

Este movimiento que recorre Veracruz está sentando las bases de una organización netamente ciudadana, que se mueve y se moverá con recursos de la propia gente y que será una importante alternativa para los indecisos y para los hartos de tanta promesa fallida. Y su número es legión, aunque no lo crean las encuestas del Patriarca.

Los independientes están al alza y se preparan para crecer aún más y dar una magnífica pelea electoral ya en 2024.

No los pierda de vista, porque es muy probable que termine votando por ellos.

 

sglevet@gmail.com