A quien no le fue muy bien recién viajó a México, fue al embajador ante la Santa Sede, Alberto Barranco Chavarría. El diplomático viajó desde El Vaticano a México para participar en la Reunión de Embajadores y Cónsules, y tremenda fue su sorpresa al llegar a la Ciudad de México, cuando descubrió que su equipaje fue abierto y saqueado. El robo fue de una loción, una figura tallada en mármol y objetos religiosos que le habrían sido donados directamente por el Papa Francisco. El embajador, además de hacer la denuncia en redes sociales, presentó la queja formal. Lo único que le dejaron fueron las cajas y certificados de autenticidad. Lo consignó Bajo Reserva de El Universal
