/ Livia Díaz /
Es muy ambiciosa y por lo tanto poco creíble, si nos remitimos a las estadísticas y cifras, pero que desmiente la realidad por todas conocida, los derechos de las mujeres a decidir en su salud, reproducción y desarrollo, sigue sujeta a políticas públicas, que muy poco abonan a su felicidad.
La mayoría de mujeres estamos sometidas a lo que nos den o no, quienes están en contacto directo con nosotras, personal de salud que muchas veces no cuenta con la capacitación, herramientas técnicas, suministros ni medicinas.
Ayer fue noticia nacional que dos parteras atienden a las mujeres en un hospital de la huasteca hidalguense, si es que ellas eso prefieren. Hace una década había ese servicio en la huasteca veracruzana, pero quienes lo promovieron ya no están y quienes dirigen ahora esto, ya no quieren seguirlo porque no cuentan con el concepto que permitió dicho trabajo. En aquél entonces a las parteras se les reunía, se les capacitaba y con un poco de suerte les daban maletín con estetoscopio y otros elementos. Podían tener guantes y credencial.
Para que esto no siga siendo sexenal, se volverá ley. O al menos eso esperamos después de escuchar a la diputada federal Ivonne Cisneros, dar a conocer que se reformó la Ley General de Salud y la Ley de Acceso a una vida Libre de Violencia, para tipificar a la Violencia Obstétrica como “violencia” porque, la ley no estaba así.
“Todas las mujeres que hemos tenidos hijos lo sabemos -contó- desde el embarazo, parto, puerperio, en muchas ocasiones nos enfrentamos desde a una violencia verbal, que ya casi tenemos hasta asumida o aceptada Nunca te dicen por tu nombre, te dicen “madrecita”, “mamita”, “pásale acá… y no se qué” y pues ¡no! ¿verdad? O sea, somos mujeres que tenemos una identidad y que no tienen por qué dirigirse así. Ni médicos ni enfermeras, ni personal de salud porque estamos embarazadas o vamos a parir o estamos lactando, o que se yo. Hasta los extremos de violencia que puede ser desde un maltrato en cualquiera de estos procesos y particularmente en el embarazo, hasta la imposición de procedimiento de control natal, el ligamiento de trompas sin el consentimiento de la mujer, por ejemplo Y también garantizando el derecho a decidir de las mujeres el cómo quieren y deben tener su parto, pues somos un país pluricultural, y hay diversas formas de mirar la maternidad. Entonces esto va a implicar que el Sector Salud vaya también preparando sus instalaciones para que, aquéllas mujeres que quieran parir, en posición vertical, lo puedan hacer. Hay hospitales que ya tienen salas para ello, pero son muy pocas, y también darle impulso a la partería tanto tradicional, como profesional, para todas aquéllas mujeres que deseen tener a sus hijos e hijas así.
COMO QUIERES PARIR
Estamos ya en espera de la publicación definitiva. Es una ley general nacional, federal, en cuanto esté, según dijo, la va a traer a Veracruz para difundirla y que la vean todos y todas, ya que permite a “la mujer el derecho a decidir, y cómo es que quiere su control natal”
