Checo Pérez .

**CON SINGULAR ALEGRÍA.

/ POR GILDA MONTAÑO /

 

¡Checo Checo Checo, ra ra ra! Y de repente tu bandera mexicana estaba en mero medio. Y de sopetón te empezaron a tocar el himno nacional, personas que ni siquiera te conocían. Pero tu sí y te emocionaste tanto, que se te salieron las lágrimas, y a mi también. Y a México entero. Y la verdad, es que ya hacía falta que una de estas emociones importantes, cimbraran el suelo mexicano.

Y allí estabas tú, joven, tú lleno de vida, llorando tus emociones. ¿Cuánto tiempo te habrá tomado poder ganar este lugar, que te merecías? Años enteros de luchas y sacrificios. Porque esto de poder competir, y ganar, se dice muy rápido, pero la verdad es cuestión de años y años de sacrificios.

Y yo te veía con tu camisa azul, tu traje lleno de emblemas, en medio de los triunfadores, con tus ojos cerrados llenos de lágrimas y debajo exacto de tu bandera. Y no pudiste, no debías por nada dejar de emocionarte.

Yo te vi en varios canales. En Fox, uno de esos, en donde decía que “Ese era el momento exacto en el que Checo Pérez no pudo contener la emoción de llevarse el Mónaco GP. Las lágrimas de tanto esfuerzo. Todo ha valido la pena. Eso es ‘ser mexicano’.”.

Porque la verdad en este tiempo en el que todo está hecho un caos, que en tu país, de norte a sur y de oriente a poniente, las cosas están tan difíciles, y que no acaban nunca, sino que se aceleran cada vez más, una gota de luz, y brillantez en el infinito, hacen que se nos aclare el paísaje y veamos a un México con tantas ganas como tu le echaste a tu competencia.

Eres muy muy oven. Yo no se mucho de ti. No sé si ya te casaste, si tienes hijitos… lo que si supongo y percibo, es que eres alguien que ha estado luchando denodadamente para ser el mejor. Y eso no es fácil. No sé cuándo empezaste a subirte a un coche, por que escudería, y si de repente te fuiste a otra, o esta misma siempre te arropó. Pero de la que quieras ser, ahora le diste un gran triunfo.

Pero ya basta de decirte y desearte tantos halagos y felicitaciones. Lo que en este momento sé, es que a mi, desde mi trinchera, viéndote en la pantalla, y oyendo algo que sí es muy mío, me cimbró el corazón. Porque la identidad nacional está al frente de cada momento de mi vida. Porque ese sonido, por más lejos que esté, me hace que me levante, que me cuadre y que lo respete infinitamente.

Como a quienes están en cada esquina luchando por nuestras vidas. Por nuestras circunstancias perversas e inadmisibles. Por este país que se está convulsionando de tanto malvado al que, además hay que cuidar, porque los derechos humanos, también son de ellos. Hazme favor.

En fin, mil gracias por tu tiempo, tu talento y tu gana de salir adelante. Quien hubiera pensado que un Checo, que se apellida además Pérez, nos haría muy felices a estos mexicanos que por un minuto, día, o semana, se nos quitó la tristeza en la que vivimos y nos está dando la seguridad de saber que somos unos grandes ganadores de la vida. Gracias.

gildamh@hotmail.com