Yamiri Rodríguez Madrid
Es innegable que, por su riqueza natural, hay muchos pendientes en la agenda ambiental veracruzana que urgen resolver, pero también es de destacarse cuando hay buenas noticias. Un ejemplo de lo anterior es la declaratoria de Reserva Ecológica del predio San Pedro el Monte, que comprende parte de los municipios de Las Vigas, Acajete, Coatepec y Perote.
De acuerdo con las cifras oficiales, este predio de bosque coníferas se convirtió en la vigésima séptima Área Natural Protegida (ANP) del gobierno veracruzano, con una superficie de 457.5 hectáreas, por lo que con su preservación se conservan también los manantiales que aportan el 38.5 por ciento del agua que consumen Xalapa y la región, entre otros beneficios.
Si pudiéramos ver todo el estado de Veracruz desde las alturas y compararlo año con año, seguramente nos pondríamos a llorar al ver la cantidad de naturaleza que hemos perdido, en parte por la tala inmoderada, los incendios forestales, pero también con el crecimiento de la mancha urbana.
No hay que ir muy lejos para constatarlo. En Xalapa y la región han desaparecido hectáreas de cafetales, centenares de araucarias han sido taladas, para dar paso a fraccionamientos, centros comerciales, a la modernidad. En la zona conurbada Veracruz-Boca del Río-Alvarado, los manglares están en grave riesgo por la exclusividad residencial.
A eso sumemos que hay pocas campañas de reforestación y, los ciudadanos, ni por equívoco hacemos lo propio sembrando un árbol en nuestro patio, en el camellón, en el parque de la colonia. Vivimos entre planchas de cemento. Es obligación de las autoridades preservar nuestro entorno, sancionar a quienes lo vulneren, pero también, nosotros, como vecinos de esta tierra, debemos sumarnos a su cuidado. Cada pequeña acción hace la diferencia, para bien o para mal, en nuestro presente y nuestro futuro.
@YamiriRodriguez