Colocan Altar de Muertos de Chicontepec en el MAX
– La ofrenda con flores de cempasúchil, mano de león y alimentos de la región de Chicontepec, estará en el vestíbulo del Museo de Antropología de Xalapa
– Instalarán también una mampara didáctica tomada de un tríptico de Álvaro Brizuela Absalón, con datos del diario de campo de Román Güemes Jiménez+
25.10.2023 Xalapa, Ver.- .- A partir de este sábado 28 de octubre y hasta el 5 de noviembre, estará abierto al público en el vestíbulo del Museo de Antropología de Xalapa el altar ofrenda dedicado al Día de Muertos, que este año estará basado en las tradiciones de la región de Chicontepec, Veracruz.
En esta ocasión se instalará también una mampara didáctica tomada de un tríptico de Álvaro Brizuela Absalón, con datos del diario de campo del antropólogo, lingüista, poeta e historiador Román Güemes Jiménez, quien dedicara su vida a registrar las tradiciones de la Huasteca.
Las celebraciones dedicadas al día de muertos en la región de Chicontepec comienzan el 18 de octubre, día de San Lucas. Según la tradición, es él quien da permiso a las ánimas para asistir a la fiesta, conocida como Xantolo.
Los altares que se instalan en este municipio y lugares aledaños se distinguen por un arco que se integra por tres líneas de flores: cempasúchil, mano de león y la flor blanca de San Lucas.
La ofrenda se compone por frutas como manzanas, mandarinas, naranja, plátano; canastas con cacahuates, camotes hervidos, yuca enmielada, calabaza en dulce y el pan de muñeco. Entre la comida que se coloca también se incluye el guisado de ajonjonlí con frijol de temporada, huevos hervidos con salsa, tamales, pan, chocolate, arroz rojo, además del refresco, tabaco y aguardiente.
Las velas se ponen en una penca de plátano, a manera de candelero, que se coloca frente al altar y el copal, para sahumar. Otros elementos importantes que integran este altar son las vasijas de barro, las servilletas bordadas, los morrales de yute, cestos y veladoras.
En esta región, la colocación de los altares y ofrendas se acompaña con la detonación de cohetes y con los sones conocidos como mijkasones (sones fúnebres), música ceremonial propia de esta celebración.
Las festividades culminan el 30 de noviembre, día de San Andrés, porque según el ritual las ánimas se despiden con el ueyitlamakauali (despedida grande) y es precisamente San Andrés quien las recibirá.
Los esperamos en el MAX a partir del 28 de octubre en horario de 9:00 a 17:00 horas. La entrada es gratuita los domingos.