*Recomendaciones de filtrado de aire y ventilación frente al coronavirus COVID-19
17 mayo 2020.- La crisis sanitaria actual pone de relieve las importancia de la tarea de contención del virus que hacen ingenieros HVACR, personal de servicio y mantenimiento de aire acondicionado y propietarios y operadores de edificios, y de la importancia de la evaluación cuidadosa que hacen de los sistemas de ventilación de los edificios y sus condiciones.
Expertos de asociaciones internacionales como ASHRAE (Sociedad Estadounidense de Calefacción, Refrigeración y Aire Acondicionado), REHVA (Federación de Asociaciones Europeas de Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado), ATECYR (Asociación Técnica Española de Climatización y Refrigeración), AFEC (Asociación de Fabricantes de Equipos de Climatización) o EUROVENT (Asociación Europea de la Industria para la climatización de interiores, la refrigeración de procesos y las tecnologías de la cadena de frío alimentario) afirman que la ventilación y la filtración proporcionadas por los sistemas de climatización contribuyen a reducir la concentración de los virus y bacterias en el aire interior y, por lo tanto, el riesgo de transmisión.
Una ventilación adecuada, con un mayor grado de suministro de aire fresco, el uso de los tipos de filtros de partículas de aire correctos y un mantenimiento cuidadoso son factores importantes para la contención del brote de coronavirus.
La asociación Eurovent emitió recientemente una serie de recomendaciones destinadas a propietarios, operadores y mantenedores de edificios, especialmente residencias y centros de salud, de las que nos hacemos eco en este artículo, con el objetivo de tener una serie de medidas que faciliten la contención del virus en el aire.
Calidad el aire interior
Filtros y su papel protector.
Los filtros HEPA obligatorios en Hospitales.
El nuevo virus del SARS-CoV-2, que causa la enfermedad COVID-19, se transmite principalmente por contacto con personas infectadas, según la OMS. La respiración, así como la tos y los estornudos liberan diminutas gotas infecciosas en el aire que pueden contaminar las superficies circundantes y, por supuesto, el aire del entorno inmediato. Estas gotitas, denominadas aerosoles, pueden ser de diversos tamaños, de 1 a más de 10 µm (micrón o micrómetro, 1 micrón equivale a 0,001 mm). Los expertos suponen que los virus no vuelan ocasionalmente en el aire, sino que siempre están encerrados en gotitas o adheridos a otras partículas.
Esto plantea la cuestión de cómo los sistemas de ventilación y aire acondicionado juegan un papel en la contención de enfermedades epidémicas como COVID-19. A continuación, Eurovent, esboza recomendaciones básicas, que directa o indirectamente influyen en la contención de los virus y el bienestar de las personas en los espacios ocupados. Estas recomendaciones se basan en un amplio consenso de la industria y deberían servir de guía para las mejores prácticas en relación con la filtración del aire y la ventilación en la crisis actual.
La calidad de Aire Interior (CAI)
La calidad del aire en interiores se ha convertido en un tema popular en los últimos años a medida que más y más países cambian su enfoque hacia la salud y el bienestar de los ocupantes de los edificios en su vida cotidiana. La mayoría de la gente en el mundo industrializado pasa hasta el 90% de su tiempo en interiores. La exposición a los contaminantes del aire, desde el polvo a las esporas, las bacterias, los virus y los compuestos químicos tiene una influencia directa en el sistema inmunológico de las personas y puede causar una variedad de afecciones, desde alergias hasta cáncer o – una enfermedad epidémica como COVID-19.
Mantener una calidad de aire interior saludable se convierte así en una necesidad general y básica, pero extremadamente importante. Si bien esto es cierto en todo momento, es imperativo en tiempos de una crisis sanitaria más amplia evitar no sólo la propagación directa de un virus, sino también apoyar el sistema inmunológico de las personas para que puedan soportar impactos más serios de una enfermedad agresiva y así reducir la presión sobre un sistema de salud que lucha contra la sobrecarga.
Filtros y su papel protector
La selección de los filtros de aire depende del entorno de aplicación y debe ser evaluada cuidadosamente. Si bien los filtros de aire normales no están diseñados para evitar la propagación de los virus, son esenciales para reducir al mínimo el riesgo, ya que los virus tienden a adherirse a las partículas y aerosoles transportados por el aire. Por lo tanto, los filtros regulares con una alta eficiencia de filtración (filtros ePM1) son cruciales para reducir el riesgo de enfermedades transmitidas por el aire todo tipo de edificios.
Los Filtros HEPA obligatorios en Hospitales
Los filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air) son obligatorios en entornos críticos como hospitales e instalaciones sanitarias y también pueden recomendarse para entornos de riesgo medio (alta densidad de personas) como aeropuertos, escuelas u otros espacios públicos. A la luz de la problemática de COVID-19 de afectar gravemente a los ancianos y a las personas con afecciones médicas existentes, también se recomienda el uso de filtros HEPA en todas las instalaciones diseñadas para apoyar, ayudar, alojar o cuidar a estos grupos. En general, la industria recomienda siempre una alta eficacia de los filtros, máxime durante la duración de la epidemia. Los filtros HEPA no deben ser alterados para adaptarlos a un sistema existente. El filtro debe ser fabricado en consecuencia. ¡Cortar, doblar o cualquier otra alteración que se haga incrimina la estanqueidad y hace que el filtro sea inútil! Sólo las personas capacitadas y con el cuidado adecuado deben instalar los filtros HEPA sin dañarlos. Los filtros HEPA también deben contar con un sistema de contención dedicado (llamado Bag-in-Bag-out) para facilitar su sustitución sin contacto físico con el material contaminado. Después de la instalación se requiere un control de integridad del sistema de filtración.
Los filtros HEPA son eficaces en el filtrado de virus y bacterias. La descontaminación regular mediante la fumigación del sistema de ventilación y el espacio ventilado ayuda a mantener los filtros HEPA y los sistemas de ventilación en orden. La fumigación suele hacerse con peróxido de hidrógeno vaporizado (VHP – H2O2) utilizando generadores móviles de VHP (Steris, Bioquell, etc.). Hay que tener en cuenta que el suministro de aire a las habitaciones individuales está desacoplado de la Unidad de Tratamiento de Aire durante el proceso. Los filtros HEPA deben ser evaluados e inspeccionados en cuanto a su integridad cada 6 meses y serán reemplazados una vez que alcancen la caída de presión final indicada. El personal de mantenimiento que se ocupa de los filtros HEPA debe estar especialmente capacitado para observar el cuidado adecuado. En caso de ausencia de sistemas de contención, los filtros HEPA sólo se manipularán con ropa protectora (gafas, máscaras, guantes y trajes desechables). Deben tratarse como riesgos biológicos y eliminarse de acuerdo con las normas y reglamentos internacionales. En ningún caso se permitirá que se eliminen como residuos normales. Lo mismo se aplica, por supuesto, a la ropa de protección del personal de mantenimiento.
Ventilación y filtración del aire en UVIS
En las Unidades de Cuidados Intensivos, donde se debe mantener una presión de aire positiva en la habitación, la filtración del aire con filtros HEPA debe ser instalada en el lado del suministro de aire.
En las salas de aislamiento u otras áreas críticas como los laboratorios, es necesario mantener una presión de aire negativa para prohibir que el aire contaminado pase al exterior. El sistema de ventilación no debe recircular el aire sin la filtración HEPA y el sistema de protección ultravioleta (UV) adecuado. Para estas aplicaciones, el sistema de filtración de aire debe instalarse en el lado de la salida de aire, utilizando filtros HEPA con un sistema de contención Bag-In-Bag-Out.
En las habitaciones donde no hay un sistema de ventilación adecuado, se recomienda el uso de un sistema de purificación de aire completo independiente (¡incluyendo la filtración HEPA!). Proporciona soluciones totales de aire limpio al eliminar tanto las partículas en el aire como otros contaminantes.
Es necesario evitar a toda costa la contaminación cruzada entre diferentes salas. Se recomienda una evaluación periódica y detallada del sistema de ventilación para asegurar la integridad del sistema y su correcto funcionamiento. Estas evaluaciones deben ser realizadas por expertos.
Aire acondicionado y coronavirus
La asociación AFEC emitió un comunicado en el que asegura que no es recomendable prescindir de los sistemas de climatización y ventilación para reducir la transmisión del virus. Todo lo contrario, los filtros de los equipos de aire acondicionado reducen las partículas suspendidas en el aire, por lo que contribuyen a mejorar la calidad del aire que se respira en espacios interiores.
Las instalaciones de climatización son seguras y necesarias para alcanzar unas condiciones óptimas de bienestar e higiene en el interior de los edificios, mejorando la calidad del aire interior. Lo importante es garantizar su adecuado mantenimiento y limpieza.
Una adecuada ventilación de los espacios interiores, independiente o integrada en sistemas de climatización, garantiza una renovación permanente del aire y elimina partículas suspendidas en él, reduciendo así el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas.
Los espacios no acondicionados pueden provocar estrés térmico, lo que puede perjudicar a quiénes estén en situación de convalecencia. Para garantizar el bienestar de las personas, lo más recomendado es mantener unas condiciones interiores de temperatura de entre 19ºC y 21ºC en épocas de calefacción y entre 24ºC y 26ºC en época de refrigeración, con una humedad relativa del 40%-60%.
Además, los propios equipos de aire acondicionado pueden incluir sistemas de purificación y filtración del aire de alta eficiencia para reducir la transmisión de virus, bacterias y partículas en suspensión, todo ello mediante la propia recirculación del aire, comandada y monitorizada por el mismo equipo o sistema.
Los sistemas y equipos de climatización mejoran la calidad de vida de las personas, proporcionando confort y contribuyendo a obtener entornos más saludables. Además de conseguir la temperatura y la humedad ambiental adecuada, son capaces de renovar y filtrar el aire interior, eliminando micropartículas del ambiente, haciendo así que el aire que se respira sea más limpio.
La correcta ventilación, un aliado que reduce el riesgo de contagio.
La asociación Atecyr también defiende que las instalaciones de climatización pueden ser un aliado que ayude a reducir el riesgo de que una persona infectada, que podría ser asintomática, contagie a otros usuarios que estén en el mismo espacio, además de evitar expandir el coronavirus a otras zonas del edificio. El riesgo del contagio en los edificios se reduce de forma importante con una adecuada ventilación de las estancias.
Atecyr ha elaborado una Guía de recomendaciones de operación y mantenimiento de los sistemas de climatización y ventilación en centros no sanitarios para la prevención del contagio por COVID-19 para ayudar a que el sector de la climatización en España -que comprende ingenieros, arquitectos, fabricantes, instaladores, mantenedores, gestores energéticos, propiedades y la propia administración- sea consciente de la necesidad de hacer cambios en el funcionamiento de las instalaciones de climatización que hagan edificios más seguros de cara a la posibilidad de contagio y permitan aplicar las soluciones existentes en función del sistema y el tipo de instalación.
En muchos casos, serán los mantenedores de las instalaciones los que realicen estos cambios en las condiciones de funcionamiento de las instalaciones para hacerlas más seguras. Es recomendable realizar una revisión general de la instalación de climatización y ventilación antes de la reapertura de los locales, donde se realicen operaciones de limpieza y desinfección de rejillas, difusores, filtros y baterías.
Fuente Calor y Frio.com