Por Yamiri Rodríguez Madrid
Durante años se ha luchado porque la política sea más pareja para todos, que existan más espacios de representación para mujeres, jóvenes, indígenas y personas con algún tipo de discapacidad, pero muchas veces eso se hace solo por cumplir con una cuota y no con una verdadera convicción.
En el 2000, Don Gilberto Rincón Gallardo fue candidato presidencial del Democracia Social, conocido como el Partido de la Rosa, y hoy extinto; abanderaba precisamente el tema de la discriminación, no solo por padecer una malformación congénita, sino por todas las injusticias que había visto durante décadas.
La senadora con licencia y hoy candidata de la alianza Va por México al gobierno de Zacatecas, Claudia Anaya Mota es otro gran ejemplo, pero desafortunadamente son muy pocos los espacios para ellos, máxime cuando aproximadamente 10 por ciento de la población en el país sufre algún tipo de discapacidad.
Acayucan, municipio veracruzano ubicado en el sur, ha puesto un buen ejemplo. Luego de que su presidente municipal solicitara licencia al Congreso Local, asumió su suplente el encargo, el joven Ángel Hernández.
Ángel tiene apenas 31 años; es ingeniero en Sistemas Computacionales, ha tenido logros deportivos en el lanzamiento de jabalina y hoy es la cabeza de un municipio que hace años era una gloria ganadera y hoy es un foco rojo por la violencia. Su parálisis cerebral no ha sido un impedimento para alcanzar todo lo que se ha planteado en la vida.
Yo no recuerdo en la historia de Veracruz un presidente municipal que haya tenido parálisis. Su claridad y fortaleza es de admirarse y se podría apostar que los meses que esté al frente de la administración municipal hará un buen trabajo pues es evidente su perseverancia e interés.
Un gran acierto tuvo el perredista Cuitláhuac Condado Escamilla al invitarlo como su suplente, sabedor de la capacidad y valor que este joven veracruzano tiene pues, su trabajo, será un ejemplo nacional de inclusión.
@YamiriRodriguez