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29.08.202 Ciudad de México.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) Ha Emitido una Recomendación a la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGEV) y a la Secretaría de Seguridad Pública del mismo estado (SSP), en relación a Actos de Tortura, Incluida la Sexual, Cometidos contra Seis Personas en 2014
En respuesta a una investigación exhaustiva, la CNDH ha concluido que las diversas fuentes de información concuerdan en sus relatos de los hechos de tortura sufridos por las víctimas. Basándose en el Manual de Investigación y Documentación Efectiva sobre Tortura, Castigos y Tratamientos Crueles, Inhumanos y Degradantes (Protocolo de Estambul), así como en los testimonios de las víctimas, la CNDH ha dirigido la Recomendación 118VG/2023 a la FGEV y a la SSP por las graves violaciones a los derechos humanos de un grupo de personas, ocurridas en Coatzacoalcos y Las Choapas.
La CNDH tomó a su cargo este caso a partir de una solicitud de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Veracruz (CEDHV), que buscaba la intervención de la CNDH debido a limitaciones legales para resolverlo. Este proceso se inició el 27 de mayo de 2021, después de que se recibiera un oficio de la CEDHV el 21 de mayo de 2021.
De acuerdo con la información documentada, entre el 5 y el 11 de febrero de 2014, seis de las víctimas fueron detenidas de manera violenta por agentes de policía, quienes las sometieron a diversos actos de tortura con el objetivo de obtener confesiones de delitos. Posteriormente, las obligaron a firmar documentos y las ingresaron en centros de reclusión, donde continúan detenidas.
El 20 de marzo de 2018, el Juzgado Primero solicitó a la CEDHV llevar a cabo el Protocolo de Estambul en las personas involucradas, a través de especialistas independientes. La Comisión Estatal abrió un expediente de queja en respuesta a esta solicitud judicial, para llevar a cabo las investigaciones y diligencias pertinentes.
La solicitud del juez se originó tras determinar que los estudios realizados previamente por personal de la FGEV no eran imparciales ni independientes, lo que requería la aplicación del protocolo a todas las personas involucradas para verificar la veracidad de sus versiones y fortalecer sus denuncias de tortura.
El análisis de las evidencias permitió a la CNDH confirmar actos de tortura y tortura sexual en perjuicio de las víctimas. Se demostró que hubo intencionalidad por parte de los perpetradores para causar lesiones graves y aflicciones severas a las víctimas, quienes fueron sometidas a sufrimientos físicos y psicológicos con el propósito de obtener confesiones o aceptación de delitos. Las lesiones y aflicciones persistían incluso en el momento de la aplicación del Protocolo, evidenciando todas las características esenciales de la tortura.
En virtud de lo anterior, la CNDH exhortó a la FGEV a colaborar con la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención Integral a Víctimas para inscribir a las víctimas en el Registro Estatal de Víctimas de Veracruz y proceder a la reparación integral del daño, incluyendo compensación y atención médica y psicológica.
La FGEV también debe integrar la Recomendación en la Carpeta de Investigación correspondiente, colaborar con la autoridad investigadora designada y colaborar con el Órgano Interno de Control de la FGEV en la presentación de denuncias contra los servidores públicos implicados en los hechos.
Con el objetivo de prevenir futuros casos similares, la FGEV deberá implementar un programa de capacitación dirigido a su personal, enfocado en la sensibilización en derechos humanos. Este programa incluirá directrices para el tratamiento de personas detenidas y el manejo de situaciones que involucren lesiones, tortura o tratos indebidos.
Adicionalmente, la FGEV y la SSP deberán llevar a cabo un programa de capacitación para los médicos adscritos a sus dependencias, que establezca la forma adecuada de registrar y documentar lesiones en personas detenidas, incluyendo evidencia de tortura o maltrato.
