*Ayuda a tus hijos a reconocer el discurso de odio y a saber qué hacer cuando lo experimenten.
12.12.2023.- Los discursos de odio tienen una larga historia, pero el crecimiento de las comunicaciones en línea facilita que ahora puedan circular más lejos y rápidamente.
Ya sea en persona o en línea, casi todos los niños, niñas y jóvenes estarán expuestos a discursos de odio en algún momento. Como madre, padre o cuidador, es importante hablarles sobre cómo reconocerlo y saber qué hacer cuando lo experimente
¿Qué es el discurso de odio?
El discurso de odio puede describirse como cualquier tipo de comunicación oral, por escrito o comportamiento que ataque o discrimine la identidad de una persona o grupo, con base en la religión, la etnia, la nacionalidad, la raza, el color, la ascendencia, la discapacidad, la edad, el género o la orientación sexual. El discurso de odio también puede incluir otros “factores de identidad”, como el idioma, el origen económico o social, o el estado de salud.
El discurso de odio no son solo palabras. Puede ocurrir tanto en persona como en línea y se puede expresar de muchas maneras, incluyendo imágenes, dibujos animados, juegos, videos, objetos, gestos y símbolos.
Su objetivo es provocar una respuesta emocional como el miedo, la angustia, el aislamiento o la intimidación, para propagar el odio en la sociedad, incluso incitando al abuso y la violencia.
A menudo se dirige a grupos históricamente vulnerables y marginados.
¿Cómo afecta a la niñez el discurso de odio?
Los niños, niñas y jóvenes son especialmente vulnerables al discurso de odio, tanto en línea como en persona. Al escuchar o leer discursos de odio dirigidos directamente a ellos o a una parte de su identidad, como su raza, color o género, pueden sentir que hay algo diferente o incorrecto en ellos. Esto puede afectar su autoestima y puede conducir a un deterioro de su salud mental, como experimentar sentimientos de ansiedad y depresión, o incluso pensamientos sobre autolesiones y suicidio.
El discurso de odio puede incitar a la violencia y hay muchos ejemplos en los que ha llevado a que personas, incluidos niños y niñas, sean atacadas y asesinadas.
Discurso de odio vs. libertad de expresión
La libertad de expresión es un derecho humano y la lucha contra el discurso de odio protege este derecho.
Es posible estar en desacuerdo o criticar a un individuo o grupo sin amenazar su bienestar y seguridad.
El discurso de odio limita la libertad de expresión, ya que las personas a las que se dirige el lenguaje de odio no se sienten seguras para expresarse libremente.
¿Qué es trolear?
“Trolear” es cuando alguien publica o hace un comentario en línea con el objetivo de interrumpir, llamar la atención y causar angustia.
Se convierte en discurso de odio cuando las acciones promueven el odio y la discriminación contra la identidad de una persona o grupo, por su género, raza u orientación sexual.
Las personas involucradas en el troleo a menudo se esconden detrás de nombres falsos o publican de forma anónima, lo que dificulta su identificación.
Cómo hablar con tus hijos sobre el discurso de odio
Las conversaciones sobre temas como el odio, el racismo, el sexismo y la xenofobia pueden ser incómodas para muchos padres, madres o cuidadores. Pero es importante tratar de crear un espacio seguro para que tus hijos e hijas pueda hablar contigo y compartir cualquier cosa que tengan en mente.
Las conversaciones serán diferentes para cada familia, pero recuerda: tú eres quien mejor conoce a tu hijo o hija. Usa un lenguaje apropiado para su edad, sé un buen oyente y deja espacio para que compartan, incluso si es poco a poco y no en una sola conversación. Observa sus reacciones y sé sensible a su nivel de ansiedad.
1. Educar a tu hijo o hija sobre el discurso de odio
Explícale a tu hijo o hija que todo el mundo tiene derecho a estar seguro en la sociedad y a ser tratado con dignidad y respeto. El discurso de odio siempre está mal y depende de todos nosotros rechazarlo.
Exploren juntos qué es el discurso de odio, para que tu hijo o hija pueda identificarlo, ya sea que les suceda a ellos o a otra persona. Estas son algunas preguntas que pueden explorar juntos:
- ¿Qué crees que es el discurso de odio?
- ¿A quién va dirigido el discurso de odio?
- ¿Por qué crees que la gente usa discursos de odio?
- ¿Cómo te hace sentir?
- ¿Cómo crees que hace sentir a la persona o personas a las que se dirige?
- ¿Cómo crees que se siente la persona que envía el discurso de odio?
Anima a tus hijos e hijas a tener una actitud abierta y curiosa sobre otras personas, ya que algunos casos de discurso de odio se basan en la ignorancia o en información falsa.
Enseña a tus hijos e hijas la diferencia entre la intención y el impacto – que lo que decimos puede herir a los demás, incluso si no es nuestra intención. Es una lección importante.
Con los niños y niñas más pequeños, puedes introducir el tema hablando sobre la justicia y sobre tratar a los demás como quieren ser tratados.
Con los niños y niñas más grandes, puedes explorar ejemplos históricos para identificar cómo el discurso de odio ha sentado las bases para muchos conflictos y violaciones de los derechos humanos.
Las Naciones Unidas tiene una recopilación de ejemplos en la historia que muestran cómo el discurso de odio ha llevado a la violencia.
2. Discursos de odio en línea
El Internet y las redes sociales nos permiten conectarnos con amigos y familiares, desarrollar intereses y pertenecer a comunidades. Lamentablemente, las mismas herramientas y plataformas digitales también pueden permitir que se cree contenido de odio fácilmente, a menudo de forma anónima, que se comparte con gran rapidez. El discurso de odio tiene el potencial de propagarse en línea a una audiencia global y puede resurgir con el tiempo.
Dado que muchos niños y niñas se encontrarán con discursos de odio en línea, es importante que estés al tanto de las actividades que realiza tu hijo o hija cuando está conectado. ¿Qué redes sociales, aplicaciones de mensajería y juegos utilizan? ¿A quién siguen en línea?
Ayuda a tu hijo o hija a reconocer el discurso de odio en línea y a saber qué hacer si lo ven o lo experimentan. Estas son algunas preguntas que pueden discutir juntos:
- ¿Alguna vez te has encontrado con discursos de odio en línea? ¿Cómo te hizo sentir?
- ¿Qué harías si vieras un discurso de odio en línea?
- ¿Cómo crees que se sienten las personas que son objeto de discursos de odio en línea?
- ¿Cómo crees que se sienten las personas que lo envían?
- ¿Sabes cómo denunciar/silenciar/bloquear en las plataformas que utilizas?
- ¿Cómo podemos fomentar el respeto en línea?
Es posible que los niños y niñas no distingan entre información confiable y no confiable. Pueden resultar heridos por información falsa o pueden difundirla aún más entre sus pares.
Explícales que parte de la información en línea no es precisa y puede usarse para dañar a las personas, dividir a la sociedad, socavar la confianza e incitar a la violencia.
Recuérdales que hay otra persona al otro lado de la pantalla y que no difunda información falsa o de odio. Lo que puede parecer inofensivo para una persona puede ser profundamente hiriente para otras.
3. Habla abierta y frecuentemente con tus hijos e hijas
Cuanto más hables con tus hijos e hijas sobre temas como el discurso de odio, el racismo y la xenofobia, más cómodos se sentirán al acudir a ti si lo experimentan.
Encuentra oportunidades para hablar sobre estos temas en tu rutina diaria. Por ejemplo, si surge algo relevante en la televisión, puedes preguntarle qué saben sobre el tema y qué piensan al respecto. Escúchalos sin interrumpirlos y anímalos a que te hagan cualquier pregunta.
Si tu hijo o hija no está familiarizado con la historia de un tema determinado, utilízalo como una oportunidad para explorarlo juntos utilizando fuentes confiables.
A veces, los niños, las niñas (y los adultos) usan un lenguaje de odio pensando que es divertido o que no entienden el significado detrás de él. Si esto le sucede a tu hijo o hija, utilízalo como una oportunidad para explicar por qué sus palabras son inadecuadas y pueden ser hirientes.
Pregúntale a tu hijo o hija con quién se sentiría cómodo hablando en la escuela si experimentara un discurso de odio. Es importante que tengan a otros adultos de confianza con los que pueda hablar si es necesario.
4. Enfréntate al discurso de odio
Recuerda que tú eres el ejemplo que sigue tu hijo o hija y sé consciente de tus propias palabras y acciones, incluso en línea. Aprovecha todas las oportunidades para rechazar el discurso de odio y defender el derecho de todas las personas a ser tratadas con dignidad y respeto.
Explícale a tu hijo o hija que, si somos testigos de un discurso de odio, podemos mostrar nuestro apoyo a la persona o personas a las que se dirige y encontrar formas de rechazar el discurso de odio. Enséñale a tu hijo o hija cómo responder, cuando sea seguro hacerlo, si escucha ese lenguaje. Por ejemplo: “No usamos palabras como esas. Es hiriente e inapropiado”.
Averigua si en la escuela existe una política contra el discurso de odio. Las lecciones específicas también pueden ser una excelente manera de enseñar a los niños y niñas sobre el discurso de odio y otras intolerancias.
5. Acepta la diversidad
Explícale a tu hijo o hija que no todos somos iguales y que eso es algo bueno. El mundo sería un lugar muy aburrido si todos fueran iguales. Fomentar la apertura y la curiosidad puede ayudar a los niños y niñas a notar las diferencias y apreciarlas. Promueve la conversación, la comprensión y la empatía con las personas que son diferentes a ellos.
¿Qué debo hacer si mi hijo o hija experimenta discursos de odio?
Todos los niños y niñas tienen derecho a la protección contra todas las formas de violencia mental o física, lesiones o abusos.
Cualquier incidente de discursos de odio debe tomarse muy en serio. Dependiendo de la situación, es posible que debas informarlo a la escuela de tu hijo o hija, a la plataforma en la que sucedió o a la policía.
Escucha y tranquiliza
Si tu hijo o hija ha experimentado discursos de odio, el primer paso es darles tiempo para que expliquen lo que sucedió. Escúchalos atentamente y diles que te alegras de que hayan acudido a ti. Concéntrate en hacer que se sientan escuchados y apoyados. Es más probable que tu hijo o hija se abra si mantienes la calma al escucharle.
Sé claro en decirle que el discurso de odio está mal y que debe sentirse orgulloso de todas las partes de su identidad.
Discurso de odio en la escuela de tu hijo o hija
Si el discurso de odio proviene de un compañero de la escuela, registra la evidencia si es posible y repórtalo a la escuela.
Habla con las autoridades escolares sobre cómo protegerán el derecho de tu hijo o hija a estar seguro, y sobre cómo lo abordarán con el remitente del discurso de odio. La disciplina debe ser siempre inmediata, no violenta y enfocada a la corrección de la conducta y a la rehabilitación (no a la humillación o al castigo).
Si la escuela de tu hijo o hija tiene un consejero, habla con él sobre su experiencia para determinar la mejor manera de apoyarlo.
Discurso de odio de alguien fuera de la escuela de tu hijo o hija
Si el discurso de odio proviene de alguien ajeno a la escuela, documenta cualquier evidencia y considera denunciarlo a la policía. No dudes en hablar con la policía si tienes alguna preocupación por su seguridad.
Discurso de odio en línea
Registra la evidencia y repórtala a la plataforma de redes sociales. Revisa qué herramientas están disponibles en la(s) plataforma(s) para bloquear o restringir al remitente.