Con Guía terapeutica IMSS apoya a pacientes con cáncer

Orizaba, Veracruz, a 10 de noviembre de 2020.- Para Nancy Almeida no hay límites, está a punto de cumplir 46 años, y han pasado dos después de que superó el cáncer de mama, a través de una cirugía, cuatro quimioterapias y 25 radioterapias, por lo que asegura que tiene una segunda oportunidad de vida y la piensa aprovechar.

“Nancy, al igual que otras sobrevivientes de cáncer de mama, después del proceso que pasaron, incursionaron en otras actividades, le han dado otro sentido a su vida; descubrieron que el cáncer no es sinónimo de muerte”, explicó la coordinadora de la licenciatura en enfermería, del Hospital General Regional (HGR), del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Orizaba, Maricruz Aguilar Martínez.

Señaló que las pacientes de cáncer, a nivel emocional, empiezan con un duelo ante lo que consideran una muerte anticipada, y sienten temor e incertidumbre.

Ante ello, es conveniente brindarles apoyo y guía terapéutica para que entiendan su situación y, sobre todo, que con estricto apego al tratamiento, vigilancia y cambios en su estilo de vida, hay altas probabilidades de sobrevivencia.

En el HGR, a los pacientes oncológicos se les brinda apoyo tanatológico, disciplina mediante la cual se aborda lo relacionado con las pérdidas, en este caso la salud, el impacto psicológico tanto para el afectado como para su núcleo familiar, y las formas de avanzar, hasta llegar a la aceptación y a la atención.

Varios días a la semana, una especialista en el tema acude al servicio a ofrecer pláticas al respecto, en las que menciona las etapas del duelo y la conveniencia de darse el tiempo para pasar por cada una.

“Se otorga terapia a quienes enfrentan mayores dificultades para entender lo que está pasando con su salud física y emocional”, apuntó.

Nancy narró que gracias a una autoexploración en 2017, se detectó una bolita, que derivó en una cirugía efectuada en el HGR, en Orizaba, para extraer el tumor que estaba encapsulado en su seno.

Actualmente se encuentra en vigilancia médica, y cada tres meses es sometida a análisis de sangre, radiografías y lo que el médico determine, para asegurarse de que se encuentra bien.

La derechohabiente destacó la oportuna y eficiente atención que recibió en el IMSS, tanto de los especialistas que la han atendido, como de los integrantes del equipo de la Ruta Rosa, quienes hicieron un excelente trabajo de acompañamiento al inicio de su padecimiento; y de las enfermeras responsables del servicio de quimioterapia.

Parte de la nueva vida de Nancy consiste en infundir positivismo y energía a otras personas, mediante trasmisiones en video que realiza en redes sociales.

Además, baila, pasea, colabora en campañas de mejoramiento ambiental, organiza clínicas de basquetbol y retomó su afición por la práctica del béisbol; y todo lo que en conjunto con su hija Dania Jimena, de 17 años, se le ocurre.

Dania Jimena comentó que admira de su madre por la fuerza que demostró en todas las entradas y salidas al hospital; y reconoce su valor para compartir lo que vivió y dar mensajes de aliento a otras personas.

“Es mi vida, mi mejor amiga, soy su fan número uno; y sé que siempre va a estar para mí”, aseguró.

A las hijas e hijos de pacientes con cáncer de mama, les pidió ser positivos, aunque haya momentos en que se sientan mal y quieran desahogarse con alguien; les aconsejó hacerlo, pero con las personas indicadas. Aseguró que sí se puede salir adelante como familia, pese al cáncer de mama.

Por último, Nancy le envió un mensaje a los pacientes con cáncer de mama: cuando haya momentos duros, en que sienten que van a decaer, dense el lujo de sentirse así, pero después, sacúdanse, levanten la cara y enfrenten de nuevo al enemigo, les aseguro que sí es posible ganar.