*España recuerda a México los tratados comerciales por firmar.
12/02/2022/ El acuerdo de libre comercio con la UE deberá ser ratificado por unanimidad, destaca el ministro español este fin de semana “luego de las segundas declaraciones del presidente mexicano. Estábamos a la espera de ver qué iba a decir”, sostuvo.
El ministro de Exteriores de España, José Manuel Albares, llamó al canciller de México, Marcelo Ebrard, luego de los agresivos comentarios del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre España y las empresas donde advirtió una “pausa” en las relaciones entre ambos países.
La llamada, cita CNN, se realizó en la noche del miércoles, y “fue en un tono cordial”, explicó el portavoz sin ofrecer detalles de lo discutido.
El gobierno español que consideran que la disputa en este momento, es una boutade del estilo de gobernar de AML, algo bilateral, de preocupación escasa.
Las competencias comerciales dentro de la UE están en manos de la Comisión Europea.
En mayo de 2016, Bruselas, en nombre de los entonces 28, empezó las negociaciones con México para actualizar el maro existente, en vigor y sin retoques desde el año 2000.
Desde entonces, 13 países se han unido al proyecto comunitario, se introdujo el euro y se ha dado un giro notable al Mercado Único.
De ahí la necesidad de poner al día un acuerdo con un socio con 128 millones de habitantes y con el que hay intercambios que se sitúan en torno a los 70.000 millones de eu-ros en bienes y a los 20.000 en servicios, un 150% más que a principios de siglo.
En abril de 2018 se llegó a un principio de acuerdo en las cuestiones comerciales y desde entonces se han pulido los detalles jurídicos pendientes, como el alcance exacto de la “apertura recíproca” de los mercados de contratación pública o el nivel de transparencia.
Ambos bloques esperaban zanjar el tema a finales del año pasado, tras introducir por primera vez disposiciones específicas para la lucha contra la corrupción, incluidas medidas para combatir el blanqueo de capitales y el pago de soborno.
Pero los pasos van muy lentos. No hay un bloque como en el caso de la ratificación del acuerdo con Mercosur (frenado por las dudas de agricultores y ganadores de Francia o Irlanda), pero aún no ha sido publicado.
“No hay estimación de fechas por el momento”, dicen en la Comisión.
No hay amenazas ni presiones di- rectas ahora mismo, explican fuentes diplomáticas. Pero el instrumento está. El embajador de la UE en el país, el francés Gautier Mignot, está en contacto con las autoridades locales.
España cuenta con esa arma y los asesores del presidente mexicano son conscientes.
Las asociaciones empresariales y diferentes organismos han advertido de que un enfrentamiento tendría consecuencias serias y por eso en Bruselas dan por hecho que se quedará en una boutade, habitual en el estilo presidencial.
